Del Bosque solo tuvo diez días para preparar su debut en la Eurocopa contra Italia debido a que los jugadores de Barça y Athletic no se pudieron reunir con sus compañeros hasta el 1 de junio por haber disputado la Copa del Rey. Pero esto no supuso un problema para los españoles, que llegaron al torneo tras ganar los tres amistosos de preparación y guiados por su lema “no hay dos sin tres”, en busca de conseguir el triplete histórico que nadie había logrado. (Foto de apertura: Entrenamiento de la Selección en Gniewino).

Ramos cambió su posición

Tras mucho tiempo jugando como lateral derecho, Sergio Ramos se sentía en los últimos años con la madurez suficiente para ocupar la demarcación de central. Y sus condiciones físicas le convertían en un futbolista adecuado para el puesto. Pero sus lagunas tácticas frenaban a sus entrenadores, que preferían que el sevillano mostrara su potencia, fuerza, recorrido, juego aéreo o reflejos en la banda. Sin embargo, Mourinho sí supo exprimir ese potencial y lo consolidó como “jefe” de la zaga del Real Madrid. Realizó una gran temporada en esa posición y Del Bosque apostó por él para sustituir a Puyol. Resultó ser una apuesta muy acertada pues Piqué y Ramos formaron la mejor pareja de centrales de la Eurocopa.

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Villa y Puyol se quedaron sin Eurocopa

Uno de los palos más fuertes para España de cara a la Eurocopa fueron las lesiones de Villa y Puyol, dos piezas fundamentales. El delantero sufrió una fractura en la tibia de su pierna izquierda en diciembre de 2011 y aún le molestaba cuando esprintaba, por lo que no estaba en condiciones. El central por su parte, fue operado de una lesión osteocondral que sufría en la rodilla derecha y tampoco pudo recuperarse a tiempo. La Federación les ofreció concentrarse con La Roja en Gdansk para hacer grupo, pero ambos declinaron la oferta porque preferían recuperarse con su club antes que con la Selección. No obstante, sí estuvieron en algunos partidos para animar a sus compañeros.

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Adrián presentó su candidatura

El primer partido de preparación, ante Serbia, sirvió para que Del Bosque realizara algunas pruebas. Por ejemplo, alineó a Negredo y Soldado para poder compararlos y poder evaluarlos al mismo tiempo y en idénticas condiciones. Esta lucha la ganó el primero, que fue quien estuvo presente en la lista definitiva. Pero el gran triunfador del encuentro fue Adrián, que demostró sus ganas de estar en la Eurocopa. El delantero marcó el primer gol de cabeza y forzó el penalti que transformó Cazorla para hacer el 2-0. Finalmente no acudió al torneo, pero demostró ser un jugador de garantías para el futuro.

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Los descartes se marcharon contentos

Corea del sur era el rival de España para el segundo amistoso antes de la Eurocopa. No era más que un trámite, pues la mitad del equipo se tendría que ir para dejar paso a los nueve jugadores de Barça y Athletic que faltaban. No obstante, esto no significó que los españoles, independientemente de si se quedaban o se iban, le pusieran ganas. Como consecuencia, se pudo ver un gran fútbol combinativo por momentos que propició la goleada de la Roja. Torres de cabeza, Xabi Alonso de penalti, Cazorla de falta y Negredo sentenciaron a su rival. Corea logró hacer el 1-1 con gol de Do-Heon, pero no pudo evitar la derrota.

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Mismo bloque del Mundial

Del Bosque optó por confiar en el mismo equipo que había ganado el Mundial 2010 para disputar la Eurocopa. En la lista definitiva repitieron 19 de los campeones en Sudáfrica. Solo entraron cuatro jugadores nuevos. Juanfran, Jordi Alba, Cazorla y Negredo sustituyeron a Marchena, Capdevila, Puyol y Villa. Por otra parte, de los 23 convocados 12 habían conquistado la anterior Eurocopa con Luis Aragonés. La gran transición se realizó de 2008 a 2010. Después no hubo prácticamente cambios y ese bloque que consiguió crear el seleccionador fue clave para el éxito.

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Iniesta acabó los deberes de España

Con todos los efectivos ya disponibles, Del Bosque salió ante China con un once muy similar al de su debut en la Eurocopa contra Italia. Solo dejó en el banquillo a los culés Piqué, Iniesta y Fábregas, que prefirió darles descanso después de la Copa. Los dos primeros entraron en la segunda mitad, mientras que el último descansó por sus molestias. Especialmente destacada fue la entrada de Iniesta, que revolucionó el partido tras una primera parte un tanto deslucida de España. El manchego iluminó el camino de la Selección con su insistencia y fabricó el único tanto del partido. Tras una gran jugada individual, cedió atrás para que Silva batiera al guardameta chino y llevara a los españoles a la Eurocopa con los deberes hechos después de ganar los tres amistosos.

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Gniewino fue la sede de la Selección

España se concentró en la pequeña y tranquila localidad de Gniewino, de 2.000 habitantes, cercana a la playa del Norte de Polonia y a 70 kilómetros de Gdansk, donde jugó los tres primeros partidos. Aterrizó allí el 5 de junio y se alojó en el hotel Mistral Sport, un centro de máximo lujo con todo lo necesario. De hecho, la Federación decidió que el equipo se quedara ahí después de superar la primera fase, aunque jugara en Ucrania. Sólo cambió los planes para la semifinal y la final, donde el grupo sí se trasladó a Ucrania.

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España, la más cansada

España aterrizó en la Eurocopa con más fatiga que el resto de selecciones favoritas. Los 23 elegidos por Del Bosque sumaban 89.884 minutos en la temporada 2007-2008. Eso suponía 2.000 más que Francia, 5.000 más que Alemania y en torno a 17.000 más que Holanda, Italia e Inglaterra. Es decir, cada uno de los españoles había disputado un partido y pico más que los franceses, y en torno a dos y medio más que los alemanes. Por su parte, los 17.171 minutos que separaban a España de Inglaterra suponían 190 partidos completos y la media que resultaba era que sus jugadores tenían ocho partidos menos en sus piernas.