Porque solo la actuación del internacional portugués -sin duda el mejor sobre el campo- y los goles del argentino pudieron paliar el mejor fútbol y las imnumerables ocasiones de un Getafe que en muchos momentos dio "un baño" al Betis.
A punto estuvo de dilapidar el Betis un claro 3-0 en un partido marcado por una tremenda carga de nervios y que, una jugada, sin intención -al botar el balón y dar en la mano de Somoza- dio al Getafe la opción de optar a un triunfo que, sin hubiera sido en un combate de boxeo, se habría llevado a los puntos de todos los jueces.
Pudo el Betis solventar en los primeros 12 minutos el partido, ya que al gol de Mariano Pavone (m.4), dispuso de una clarísima ocasión de Xisco, tras medido pase de Rivera, con balón al limbo. Sin embargo, esto lo pudo pagar caro el Betis, porque poco a poco el Getafe salió de su letargo y comenzó no solo a dominar sino a crear ocasiones claras que, gracias a Ricardo, no se plasmaron en el marcador.
Así, Manu (m.16), De la Red (m.18), otra vez De la Red (m.30), con balón al travesaño del marco bético, y Albín (m.36) provocaron que el meta portugués se erigiera en el salvador de los verdiblancos.
Edu y Pavone casi sentencian
Poco antes, Edu, en remate de cabeza, desde cerca, tras centro de Pavone, había puesto la diferencia en un esperanzador 2-0 para los intereses del equipo bético. Hasta el final del primer periodo, dominio insistente del Getafe ante un Betis que ni siquiera el marcador a favor templó en demasía sus nervios.
En el segundo el ritmo del partido fue similar, con un Getafe volcado sobre el campo bético, con ocasiones desbaratadas por un portentoso Ricardo. Pero fue otra vez el Betis el que volvió a alterar el marcador y, cómo no, por medio del argentino Pavone, para poner un claro 3-0.
Pero un inocente penalti, con balón botado en el césped que dio en una mano de Somoza, transformado por De la Red, hizo que el Getafe tuviera otra vez opciones. Luego, con los nervios de nuevo a flor de piel, consiguió el Getafe su segundo gol, también en una jugada desgraciada del Betis, al desviar Melli, un remate de Manu.
Pudo sentenciar el Betis en esporádicos contragolpes, aunque Ricardo hizo al menos tres nuevas intervenciones de enorme mérito, la última a remate de Albín, para dejar el partido en mínima y agónica victoria bética que, con ella, dejan los puestos de descenso.
