Japón investiga una tercera muerte de una persona vacunada con un lote fabricado en España

El pasado 28 de agosto, el Gobierno de Japón informó de la muerte de dos personas vacunadas con uno de los lotes de Moderna fabricados en España que fueron bloqueados tras detectarse contaminación en algunas dosis. Uno de los fallecimientos fue reportado como "posible reacción a la vacuna", mientras que el otro fue registrado después de que las autoridades niponas paralizaran el uso de los lotes en cuestión.

El Ministerio de Sanidad del país asiático consideró ambos casos como "sospechosos" de constituir una reacción a la vacuna, aunque precisó que se desconocía si existía una conexión directa entre los decesos y la inoculación.

Varón de 49 años

Ahora se ha conocido que Japón está investigando la muerte de una tercera persona a la que también le fue administrada el remedio de Moderna procedente de uno de los lotes fabricados en nuestro país. El fallecido es un varón de 49 años que murió tras recibir una dosis de los mencionados paquetes antes de ser bloqueados.

Le pusieron el segundo pinchazo el 11 de agosto y su muerte fue confirmada en la mañana del día siguiente. A simple vista no se observaron sustancias extrañas en los viales usados, por lo que según apuntó Sanidad, no se sabe si hay relación entre los fallecimientos y las inyecciones.

Tanto Moderna como la distribuidora japonesa Takeda anunciaron la semana pasada que las partículas contaminantes contenían acero. Previsiblemente, estas podrían venir de "un aparato de la cadena de producción" de la fábrica española de la empresa Rovi, aunque descartaron riesgos graves para la salud salvo algún tipo de reacción local.

Lotes bloqueados

Estas partículas se observaron en 39 viales, aunque como medida de precaución Sanidad decidió bloquear tres lotes enteros (3004667, 3004734 y 3004956) con 1.630.000 dosis. Se calcula que alrededor de medio millón de japoneses han recibido dosis de estos packs afectados.

La mayoría de los lotes bloqueados se habían distribuido ya en centros de vacunación masiva de Japón, empresas y otros organismos a cargo de la inoculación. Asimismo, una parte de las dosis había sido ya empleada en pacientes, según las autoridades niponas, que no han dado datos concretos de cuántas personas habrían recibido vacunas de las partidas bloqueadas.