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Orden de búsqueda internacional para las niñas desaparecidas en Tenerife: lo que se sabe del caso

Miguel Barreto

Se han practicado registros en la casa y en una finca del padre en Candelaria, además de tomar declaración a familiares y allegados.

El pasado martes en Tenerife desaparecieron Tomás Gimeno y sus dos hijas, Anna y Olivia, de 1 y 6 años. Ese día, el progenitor debía entregar a las niñas a su exmujer, con la que compartía la custodia de las menores. Pero como el padre no lo hizo a la hora convenida, la madre acudió a la finca en la que éste residía. Al no encontrarlos, decidió denunciar el caso a la Guardia Civil de Candelaria.

La noche de la desaparición, las cámaras del puerto deportivo Marina Tenerife captaron al padre entrando y saliendo tres veces del muelle para depositar en su barco dos bolsas de lona junto a otros objetos, como mochilas y maletas. Y alrededor de las 00:30 horas, la embarcación zarpó hacia el mar. En las imágenes obtenidas no se muestra en ningún momento a las niñas.

Restos de sangre

Al día siguiente, sobre las 17:00 horas, el yate fue localizado a 4 millas de distancia del puerto de Güímar. No había ningún rastro de Tomás ni de los objetos introducidos la noche anterior en el barco. Cuando se personó la policía científica, encontró restos de sangre, pero todavía no se ha identificado si corresponde a las personas desaparecidas.

Además, la silla portabebés de una de las menores apareció flotando en el mar en la misma zona donde fue localizada la embarcación donde el padre de las niñas fue visto por última vez. Asimismo, se ha verificado que faltaba el ancla de la embarcación, por lo que agentes del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) están rastreando bajo el agua la zona donde se localizó.

Diligencias abiertas

Ahora, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Güímar ha dictado una orden de búsqueda internacional del padre y sus hijas. Las primeras diligencias que incoó el tribunal fueron por la presunta comisión de un delito de secuestro. Aunque según señalaron fuentes de la investigación a EFE, hay abiertas varias vías y no está descartada ninguna hipótesis.

Se han practicado registros en la casa y en una finca del padre en Candelaria, además de tomar declaración a familiares y allegados de los desaparecidos. El juzgado canario también emitió un requerimiento a los bancos para saber si el hombre realizó algún tipo de movimiento antes de desaparecer y se está investigando si pudo haber sacado 70.000 euros de sus cuentas.

Igualmente, se han reforzado los controles en puertos y aeropuertos y a la investigación se han unido agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil que ya intervinieron en casos como el de Diana Quer, Asunta Basterra o Gabriel Cruz.