Neymar, disgustado y la ansiedad
Neymar y compañía están que se les va la vida, para que llegue el día de los enamorados. Ese día es el Madrid vs. PSG.
Entre que se aburren en la Liga 1 francesa y que tienen una espina clavada en el costado, después de que Sergi Roberto les metiera el sexto gol en el Camp Nou hace casi un año, solo quieren empezar el partido contra el Madrid, ganar, convencer, llegar a la final de Kiev y arrasar.
Por otro lado, la defensa del Madrid es de terror.
Si los amigos del Levante les han metido dos goles, el mundo no se imagina el roto que el PSG les puede ocasionar.
Y Zidane sigue insistiendo en que la Liga no está perdida. Es un fenómeno. Dice que está disgustado porque el Levante les ha empatado.
Mira, buen lector, que hay adjetivos en nuestro extenso vocabulario, pero disgustado, nunca lo hubiera escogido.
Enfadado, decepcionado, cabreado, molesto, negado, impotente, tristón, desesperado, sin embargo, disgustado, no. Cuando vas a mil puntos de distancia del líder, no puedes estar disgustado.
Quedan menos días para que el vendaval del PSG aterrice en Madrid y cada vez el Madrid va a peor.
Lo que realmente me pregunto es, si Neymar está muy ansioso por jugar contra los blancos... ¿cómo estará Ronaldo? (quien por cierto, jugando, como nunca de mal, quiere cobrar 30 millones de euros netos. Qué vida tan rara esta, a veces).