Nápoles, el examen de Spalletti

No había rival más exigente que le pudiera caer en suerte al Barcelona. El Nápoles es un adversario de condición Champions, venido a menos en el último mes, pero realmente peligroso. Líder en la Serie A hasta hace nada, después de ganar diez de los once primeros partidos de la competición, vive ahora un período de interrogantes al perder la compostura defensiva y a causa de la lesión de Osimhen por una fractura de pómulo. Viene de perder en casa ante el Empoli y en la Europa League llegó con el agua al cuello hasta la última jornada del grupo. Ganó al Leicester y obtuvo la recompensa.

El patrón. El Nápoles ha cambiado mucho esta temporada. Con Spalletti en el banquillo, sus principios tácticos se basan en el dinamismo ofensivo, el equilibrio sin balón y el repliegue en bloque medio. Se suele desplegar en 1-4-2-3-1 o variantes similares como el 1-4-3-3 y el 1-4-4-1-1. El dibujo solo es un recurso para la idea. Empezó el curso como un tiro, con una estructura muy organizada y alto sentido de la profundidad con desmarques de ruptura de sus atacantes. Si vuelve a ese nivel, será un reto mayúsculo para el Barcelona de Xavi. Por perfil no le viene demasiado bien un equipo como el Nápoles que tiene, además, grandes jugadores.

Los nombres propios. Antes de su lesión, Osimhen estaba ofreciendo un rendimiento altísimo. El delantero nigeriano será duda hasta el último momento. De no llegar, es probable que Mertens haga de falso nueve. Politano, Insigne y Lozano completan una línea ofensiva de relevancia. Fabián es otra figura clave en el funcionamiento del Nápoles. Tanto en la construcción como en la llegada desde atrás, el internacional español está completando una campaña de altos vuelos. Zielinski es una tipología similar de jugador al andaluz, compensados ambos por el criterio de Lobotka, el rigor de Demme o las piernas de Zambo-Anguissa.

El bastión defensivo. Atrás sigue Koulibaly, un central de magnitud que ahora también está fuera por problemas físicos. Resulta extraño que no haya salido de la ciudad del sur de Italia. Le suele acompañar Rrahmani, con el buen Di Lorenzo y Mario Rui en los laterales. Ospina es un portero desigual, pero capaz también de lo mejor. No se sabe si jugará ante el Barça, porque por ahora en Europa League el titular está siendo Meret. Buen equipo es este Nápoles. Al Barça le ha tocado un hueso y también un viejo conocido de infausto recuerdo: Manolas. Con él empezó todo.

Lo mejor...

El repliegue de los de Spalletti exigirá al Barça en los ataques posicionales.

Poderío en las transiciones con Osimhen, Lozano e Insigne.

Lo peor

La Copa de África le afecta: Koulibaly, Ghoulam, Anguissa, Ounas y Osimhen.

Los problemas físicos se están cebando con el conjunto transalpino.

Lo más visto

Más noticias