Robert Lewandowski es la gran amenaza de Polonia. El delantero del Bayern de Múnich se presenta en esta Eurocopa después de batir el récord goleador de Torpedo Müller en la Bundesliga. Es un depredador del área cuyo rendimiento se ha disparado al infinito en el todopoderoso Bayern, que en Alemania es como el Madrid y el Barça juntos. Sus números son espectaculares esta temporada en la que ha marcado un gol por cada 71 minutos. Pero eso es con el Bayern. Sus guarismos goleadores disminuyen con su selección con la que ha jugado 120 partidos y marcado 66 goles, anotando un gol cada 140 minutos.

Si comparamos al delantero de Polonia con el de España vemos que Álvaro Morata marca con la Selección un gol cada 128 minutos (ha anotado 19 goles en 41 partidos). Morata ha bajado su media porque en los dos últimos partidos, el amistoso ante Portugal y el debut ante Suecia, no ha materializado las ocasiones que ha tenido (dos clarísimas que no entraron por centímetros). Lewandowski es uno de los mejores de la última década, un crack total que ha desarrollado su carrera en el mismo club. Morata ha jugado en las tres grandes ligas, ha ganado títulos y ha marcado goles en las tres, rindiendo en cuatro equipos grandes (Madrid, Atleti, Juve y Chelsea). Morata también es otro crack. Nuestro crack. Yo prefiero Álvaro a Robert. Y a Gerard Moreno. Para gustos hay colores.