La rebelión de los modestos
Llegó el gran día. Un día que puede llevar a la gloria a un grupo de auténticos gladiadores si logran la histórica clasificación del Mirandés para la final. Sea cual sea el destino, los rojillos han hecho de nuevo historia en una competición que honran como nadie. Dos semifinales en ochos años está al alcance de unos pocos elegidos. Ya lo decía el gran Carlos Pouso. Miranda y el Mirandés se convierten en ‘aldea gala’ para hacer frente a los más poderosos en el torneo del KO. Racing, Espanyol, Málaga, Deportivo, Celta, Sevilla y Villarreal, este último en dos ocasiones, saben lo que es caer ante el ‘matagigantes’ rojillo. Incluso la Real Sociedad en 2004 cuando Iban Triviño se erigió en protagonista al detener tres penas máximas en la tanda final.
Sólo cuatro equipos de Segunda han alcanzado la gran final. Y de esto hace ya mucho tiempo. Cuarenta años han pasado desde que el Castilla se enfrentase al Real Madrid. A la temporada siguiente la Federación Española prohibió a los filiales jugar un campeonato que ha ganado con el cambio de formato. La afición rojilla está preparada para llevar en volandas a los suyos. Una comunión que es y será clave para los futuros éxitos de la entidad mirandesista.