España es un país motero

En España hay asegurados cerca de tres millones de vehículos a motor de dos ruedas. España es un país motero. Por el clima favorable y por la tradición deportiva, que tuvo su lanzadera a primeros de los 70 con las gestas del añorado Ángel Nieto, con el público entregado del Jarama y con la televisión. Desde entonces, los éxitos se han sucedido sin freno. Sirvan como ejemplo los números redondos de Jorge Martín, que logró en Sepang la 600ª victoria española en el Mundial de velocidad y el 50º título repartido entre 20 pilotos. Martín conquistó una de las nueve coronas que ha sumado esta temporada el motociclismo español, junto a Marc Márquez (MotoGP) y Ana Carrasco (Supersport 300); a los cuatro de trial, con el invencible Toni Bou al frente; al de Jorge Prado en motocross y al de Maikel Melero en freestyle.

Ha sido un año brillante para el motociclismo español, como de costumbre. Y una buena excusa para compartir mesa con el presidente de la Federación, Manuel Casado, que nos trasladó sus inquietudes y sus proyectos. La RFME se encarga de organizar los Campeonatos de España que moldean el futuro, pero participa poco más en la formación del piloto, al menos en la velocidad, donde las estructuras están tan arraigadas que no necesitan su intervención. Sí lo hace en otras disciplinas, como demuestran los equipos júnior de enduro, trial y motocross. Más allá de la competición, Casado trabaja para desatascar otros problemas, como esa convivencia de la moto de campo con el entorno que tanto preocupa. Como buen motero que es, con una colección de 215 motos de trial, tiene la sensibilidad para encontrar soluciones.