NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Nadal, Ferrer y la vieja guardia

Épico, agónico, tenso, dramático, heroico, emocionante... David Ferrer remató la Operación Remontada en la Plaza de Toros de Valencia. Por la puerta grande a las semifinales de la Copa Davis. A sus 36 años y después de la dolorosa derrota del viernes ante Alexander Zverev, de 20, el Ferru no se amilanó contra Philipp Kohlschreiber, otro veterano curtido en mil batallas, y dio el tercer punto a España frente a Alemania, en cinco sets y en casi cinco horas. En concreto: en 4:51 horas, el partido más largo de la Armada en la historia de la Davis. ¿De dónde sacó las fuerzas el alicantino? Lo explicó después, casi con lágrimas en los ojos: del animoso público, de su gente de Jávea que estaba en las gradas, de su pareja embarazada que saldrá de cuentas en una semana… De la magia de la Davis. Una competición diferente.

‘Con la vieja guardia’, había titulado Jesús Mínguez la previa de esta eliminatoria de cuartos. Si sustituyéramos a Marc López por Fernando Verdasco, la alineación que ha presentado España en Valencia sería la misma que conquistó las dos últimas Ensaladeras en Barcelona en 2009 ante la República Checa y en Sevilla en 2011 contra Argentina. Tras varios vaivenes, Rafa Nadal, David Ferrer y Feliciano López continúan al frente. Incombustibles. Nadal, récord de victorias en la Davis, puso el primer ladrillo de la Operación Remontada ante Zverev, ese número cuatro del mundo que proyecta al uno. Valencia también empujó. Valencia no ha parado de empujar en los tres días. Ejemplar. Este ambiente mágico ya no se vivirá en el nuevo formato de la Davis. Será necesario, será espectacular... Pero no será la Davis. Insisto.