La mejor Vuelta será la siguiente

Nos encontramos en la semana de la Vuelta. El sábado comienza. Con una participación extraordinaria. Sólo faltará Contador, cuya ausencia es notable, pero si no está para nada, él sabrá... Con unas llegadas en alto todas inéditas. La Vuelta, por lo que se ve, goza de buena salud. Tan buena, que lo mejor está por venir. Y ha habido cosas extraordinarias: la Vuelta de 2012 con Contador, Valverde y Purito; la del año pasado con el duelo Contador-Froome; los descubrimientos del Angliru, la Bola, el Cuitu, Ézaro, la Camperona, etc. Todo esto da como resultado una audiencia acumulada en el mundo de 350 millones de telespectadores. ¿Qué deporte tenemos en España, después del fútbol, que se vea tanto?, se pregunta Javier Guillén, director de la Vuelta.

Es la consecuencia de buscar novedades y alternativas para ofrecer un espectáculo en el que todos los días sucedan cosas. Hasta el Tour cambió este año su guión clásico de la tediosa primera semana por el dinámico modelo de la Vuelta. Gracias a él, nuestra carrera cotiza al alza. Y tantas ideas bullen en la cabeza de Guillén, que uno está deseando que vengan próximas carreras en las que podamos ver subir los colosos Angliru, Lagos, Cuitu y Bola en una misma edición, o unidos los países de las tres grandes (Francia, Italia y España) con un recorrido que recale en el Mortirolo, el Alpe d'Huez y el Angliru. Realmente, las posibilidades para seguir haciendo del ciclismo un deporte singular son inmensas, y con Guillén esto no ha hecho más que empezar.