Gran Cruz para Felipe Reyes

Felipe Reyes ha recibido la Gran Cruz de la Orden del Dos de Mayo, máxima distinción de la Comunidad de Madrid. Es un justísimo reconocimiento. Los reconocimientos, por cierto, está bien que se reciban en vida y en plenitud, sin esperar a que uno se muera o se retire. El caso de Felipe Reyes es, afortunadamente, el primero. Está vivísimo y hecho un chaval. Con 35 años no podía ser menos. Pero lo extraordinario de su caso es que su edad, para un deportista, comienza a ser avanzada, y no es frecuente que pueda mantener un máximo rendimiento. Así lo entendió Messina hace cuatro años, y quiso darle de baja en el Madrid. ¡Vaya ojo el suyo! Menos mal que se fue del equipo antes de cumplir sus propósitos.

Que Reyes se encuentra en plenitud no hay duda. En el Madrid es quien más puntos mete, más rebotes coge, más tapones pone, más faltas recibe y mayor valoración tiene. Ha sido el máximo anotador del equipo en siete partidos de Liga y ocho de Euroliga, y no será porque se lo pongan fácil Llull, Carroll o Rudy. Competencia en su posición tampoco le falta. Ha sobrevivido a pívots de todas clases y procedencias. Gigantes de más de 2,15 metros y armarios de 120 kilos. La Gran Cruz, por cierto, no es que se la hayan dado por sus méritos deportivos, pero ayudan. Tener un tipo así en Madrid desde que era niño es un privilegio. Si le conocieran, se lo quedarían. Sencillo, humilde y... todo un campeón. ¿Qué más hace falta?

Lo más visto

Más noticias