Alonso no es el problema

En el contexto de la decepción generalizada por la situación de Ferrari, detecto cierta corriente de opinión que responsabiliza también a Alonso por los discretos resultados de algunos grandes premios. Excepto por su actuación de Mónaco, como ya comenté en su momento, no puedo compartir este punto de vista. Para mí, el asturiano no es el problema ni el responsable de lo que ocurre, porque ha demostrado en multitud de ocasiones que es capaz de sacar petróleo de coches mediocres.

Lo que ocurre es que el piloto, en esta Fórmula 1 moderna, llega hasta donde llega, los milagros son contados y las grandes diferencias mecánicas no las neutraliza ni Alonso ni nadie. Lo que sí me preocupa, lo reconozco, es que a medio plazo la impotencia haga mella en su moral ganadora, si es que desde Maranello se muestran incapaces de satisfacer sus exigencias. Pero confiando en que ese supuesto no se produzca, lo que tengo clarísimo es que si de algo pueden presumir en Ferrari es de un piloto de talento...