Zigic y Van Nistelrooy: el 'target man' está de moda

Para hoy, en El Sardinero, está anunciado en los carteles el mejor duelo posible de target men de la Liga: Zigic contra Van Nistelrooy. Target man es el término inglés que se emplea para definir al delantero corpulento, fronterizo con el pívot, tan útil para hacer goles como para distraer a la zaga o aguantar los pelotazos amigos hasta que llegue el segundo punta, los extremos o los centrocampistas de segunda instancia. Es experto en Física: da tiempo y espacio a quienes le rodean. No tiene buena reputación porque a menudo es desmañado o entra en situaciones límite.

W enger siempre huyó de ellos, desde los tiempos en que su Mónaco se enviciaba en el pelotazo hacia Hateley en lugar de jugar al pie como él y Dios mandan. En el Arsenal se encontró a Hartson y le dio pasaporte al West Ham. Le producen alergia. Sin embargo, algunos ofrecen una eficacia demoledora. Benítez pone y quita a Crouch según conviene, porque cambia los partidos y crea inquietudes diferentes en el rival. Lo mismo hacía Houllier con Carew. Drogba juega siempre en el Chelsea. Como Van Nistelrooy y Zigic. El serbio responde mejor al biotipo del que hablamos: ha hecho nueve goles, regalado seis más a sus compañeros y provocado cuatro penaltis. Nadie en la Liga hace pensar tanto a los técnicos rivales.

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