Espectáculo desde el primer día

La guerra entablada entre Vuelta, Giro y Tour con la UCI y su sistema ProTour provoca demasiado estruendo, pero no debe impedirnos centrarnos en lo fundamental, en lo deportivo, en lo que está en la mente del aficionado que se acercará a las cunetas o sufrirá con el pedaleo por la tele. Y lo que podrán ver será una edición 2007 apasionante, en la que las diferencias serán mínimas porque el recorrido es muy atractivo y, aunque hay menos montaña, está mejor situada. Me gusta que Los Lagos de Covadonga se suban tan pronto. Discrepo de los que creen que es prematuro, porque prefiero que la carrera se mueva en la primera semana a pasarme siete días aburrido, como en Francia, asistiendo a llegadas al sprint y a caídas dentro de un pelotón nervioso.

Además de la gran llegada en alto asturiana, la de Cerler, la de Abantos y la jornada reina de Arcalís, no hay que olvidarse de que justo después de los Lagos hay una etapa que finaliza en Reinosa en la que hay que subir cuatro puertos. Y que en la 15ª hay que pasar Monachil para llegar a Granada, unas rampas en las que el año pasado Vinokourov forjó su victoria con un gran ataque. Ahora no hay monstruos como Merckx, Ocaña o Hinault que podían decidir una ronda de tres semanas con un ataque en los primeros días. La carrera se irá calentando según avance y le puede venir muy bien a ciclistas como Alejandro Valverde, Iban Mayo o Alberto Contador. Etapas cortas e intensas y cumbres bien colocadas. Sinónimo de espectáculo.

Lo más visto

Más noticias