Examen de septiembre en pleno agosto

Mientras Villarreal y Atlético disputaban anoche su primer asalto de la final de la Intertoto, el Madrid entraba en capilla lejos de aquí, en la medieval y preciosa Cracovia. Exámenes de septiembre en pleno agosto, para resolver lo que no se resolvió en junio. La diferencia es que, gane quien gane en la Intertoto, los dos llegan preparados. Sin distracciones, con la plantilla casi cerrada, con los cinco sentidos metidos en el objetivo final, la UEFA, conscientes de su importancia y su dificultad. No me parece que sean iguales las circunstancias las de este Madrid que hoy se presenta ante todos en el prestigioso formato del pay per view de Digital + .

Lo vi en vivo, hace pocos días, en el amistoso en Alicante ante el Getafe. El público, playero y madridista en su casi totalidad, se desesperó con la abulia de sus ídolos tanto como se sorprendió por el buen juego del Getafe, cuyas combinaciones acabó por alentar con olés destinados a castigar a los galácticos. Y no es sólo eso. Basta seguir el pulso del club para saber que la atención está en Vieira, en Etoo, en si Xabi Alonso sí o no, en si es posible Owen por Etoo. En si Morientes sí o no, en si habrá por fin galáctico. En qué hacer con Núñez, Borja y Miñambres, pavones que Camacho no quiere a su lado. Hay equipo, pero no hay plantilla.

Y hay mucha confianza y mucha distracción. Los titulares son tan titularísimos que no tienen presión. Por eso Camacho reclama más plantilla, porque sabe que los bocinazos en los entrenamientos son un recurso vacío si no tiene más arma que esa, si detrás del titular no hay nada. Camacho, que perdió una previa de estas hace un año, con el Benfica, sabe que puede haber gato encerrado. Yo aún recuerdo que el Barça se dio tal susto en una oportunidad así ante el Skonto de Riga que de resultas de ello fichó a Rivaldo. Por supuesto que el Madrid debería ganar al Wisla allí y aquí. Pero jugando como ante el Getafe no será tan fácil.

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