El grupo ofensivo de los Bills presenta jugones en todas las líneas y tiene un potencial inmenso... salvo por el hecho de que están sin quaterback, claro.
La franquicia ha vivido un renacer con la compra por parte de la familia Pegula, que se ha comprometido a quedarse en Buffalo sin oír cantos de sirena.
A pesar de los grandes fichajes de LeSean McCoy y Charles Clay, los números Fantasy de los jugadores de los Bills despiertan dudas.
La decisión de apelar a los fundamentos puede ser una buena decisión para un equipo que necesita dejar atrás cuanto antes la etapa Jim Harbaugh.
Son los 49ers uno de los grandes clásicos modernos de la NFL, y eso a pesar de que llevan demasiados años sin conseguir el ansiado anillo.
La inestabilidad en el puesto de quaterback no auguran nada bueno para los de San Francisco en la Fantasy, donde Hyde será su estrella.
Muchos cambios en el ataque de San Francisco, tanto por la marcha del antiguo equipo técnico como por la ausencia de Frank Gore.
La unidad, hasta hace muy poco una de las mejores de toda la competición, afronta una nueva era con demasiadas bajas imprevistas.
Una dura defensa, un ataque terrestre poderoso y un quarterback que no se equivoca: una buena fórmula de éxito en la NFL y a la que los Chiefs se entregan con una fe ciega.
La defensa de los Chiefs tiene de todo para ser élite, pero adolece de profundidad y está expuesta a las lesiones como pocas.
Las críticas al grupo ofensivo de Andy Reid son sobre su conservadurismo, pero teniendo a Jamaal Charles sería una locura hacer otra cosa.
Kansas City presume de ser una ciudad pasional con sus equipos deportivos y, entre ellos, los Chiefs son la gran joya de la corona.
El potencial de Travis Kelce, al menos en lo que al mundo Fantasy se refiere, podría ser comparable nada menos que al de Gronk.
La marcha de Jimmy Graham y la llegada de Max Unger auguran un cambio radical de filosofía en un equipo que durante muchos años nos ha enamorado por su verticalidad.
Rob Ryan tiene más fácil su trabajo este año pues, en teoría, el ataque les dará más tiempo de descanso, pero eso hará mayores las expectativas.
Un equipo conocido por ser un demoledor espectáculo aéreo ha girado, en un abrir y cerrar de ojos, a uno más equilibrado que busca la carrera como apoyo.
El giro hacia el juego de carrera que van a experimentar los Saints hace que Ingram y Spiller sean gente codiciada en Fantasy.
Los Saints salvaron, en más de un sentido, a una parte de New Orleans en la tragedia del Katrina. Desde entonces, siguen en la élite emocional de la NFL.
Los Texans son una franquicia "nueva", pero por la forma en que está llevada y el legado espiritual que heredó de los Oilers es una clásica.
Los Texans se están ganado el respeto de la NFL con un proyecto serio y concienzudo al que todavía le faltan algunas piezas, pero que debería empezar a dar frutos ya.
O'Brien y Crennel tienen entre manos un grupo más que interesante, pero que necesita que Clowney rinda como la figura que se esperaba que fuese.
Los Texans tienen en su plantilla a uno de los grandes activos de las ligas Fantasy de los últimos años: el inagotable Arian Foster.
El equipo pierde la referencia, casi existencial, de Andre Johnson, por lo que mutará a un ataque más poderoso y terrenal con uso intensivo de TEs.
La marcha de Suh, Fairley y Mosley deja en suspenso la evolución de unos Lions que ya han demostrado que se quedan en nada cuando la defensa no acompaña a su explosivo ataque.
Los Lions llegaron a ser un gran equipo la temporada pasada gracias a que, al fin, su defensa despertó. Pero este año han perdido demasiadas piezas.