Thief: The Dark Project
Thief: The Dark Project - Nivel 8
Tenemos que entrar en la mansión a través de un pozo. Como se ha celebrado una fiesta esta noche, muchos guardias están borrachos, y nuestra misión será más fácil. Aqui empieza tu aventura.
NIVEL 8
Por fin obtendremos los otros dos talismanes para entrar en la catedral. Los tienen custodiados los Hammerites en su templo. Nos infiltraremos como un novicio, con un pergamino de recomendación que enseñaremos en la puerta. En el pergamino se nos explica que en los sitios marcados con un martillo rojo no podemos entrar, pero si no nos ven entrar no harán nada. En esta misión es más importante que en las otras esconder los cuerpos, porque si encuentran a algún Hammerite inconsciente, vendrán a por nosotros directamente y harán sonar la alarma. Durante el recorrido, nombraré cinco interruptores. Después veremos para qué sirven.
Como hemos dicho, entramos por la entrada principal. Pasamos por la puerta de enfrente y vemos una sala con una escalinata descendente. Antes de recuperar los talismanes, conviene hacer limpieza de Hammerites por casi todo el templo. Además, podemos aprovechar este recorrido previo para conocer las habitaciones y recoger todo el oro que podamos. Los dos Hammerites de la capilla los podemos dejar tranquilos, porque no saldrán de ahí de momento. Empezando por la parte derecha, en una mesa recogemos un pergamino con una oración que nos será útil más adelante. Lo cogemos y en el mismo lado del templo está el relicario, y en el soporte de la calavera hay interruptor. Cuando los dos guardias estén fuera de combate, podemos coger el First Hammer, que es uno de los objetivos de la misión. En la otra ala del edificio, encontramos una biblioteca y una puerta marcada con un martillo rojo. Bajamos al piso inferior por la escalinata.
Nos encargamos de un par de guardias que están hablando al pie de la escalinata cuando paren de hablar y sigan con su ronda.
Pasando a la habitación de entrenamiento del sur, y saliendo por la puerta del oeste, llegaremos al cementerio, donde patrullan otros dos guardias. En la penúltima tumba, en el techo de la tumba, está el siguiente interruptor. Recogemos las vasijas de oro de las tumbas. En el otro lado del edificio, hacia el este, está el jardín, y pegado a la pared del este, bajo la repisa está el tercer interruptor. Volvemos al interior del templo, y seguimos el pasillo que se dirige hacia el sur en la ala este del edificio. La primera puerta de la derecha comunica con la celda del Sumo Sacerdote y un mago la custodia. Lo eliminamos y en la celda encontramos tesoros, un martillo y una llave que abre todas las puertas del templo. Ahora podemos entrar en el resto de celdas de esta planta baja, que guardan más objetos de valor. Volvemos a la puerta cerrada de la biblioteca, la abrimos con la llave maestra y abrimos también el cofre. En el pergamino que encontramos se nos explica como recuperar los talismanes.
Cuando lo tengamos todo, vamos a la sala de entrenamiento y a bajamos por las escaleras de esta sala, para dar una vuelta por las catacumbas. Hay dos guardias patrullando, y vasijas de oro en algunas tumbas. Saldremos por la parte sudoeste de las catacumbas, desde donde parte un largo pasadizo hacia el sur. Llegamos a una zona con diversas celdas. Si giramos a la derecha, llegaremos a la sala donde están guardados los talismanes, pero de momento vamos a la izquierda, a la sala del Inquisidor. Salimos por la puerta del sur haciendo poco ruido para no despertar al Inquisidor. Nos deshacemos de él y del guardia que patrulla por el pasillo del norte. Detrás de la máquina de tortura de la pared oeste está el cuarto interruptor. Salimos al pasillo del norte y lo seguimos sin entrar en ninguna habitación. Encontraremos una puerta cerrada. Dentro, encontramos la antigua cocina, con un tesoro en varios cofres y monedas, y el quinto interruptor, junto al fuego.
Bien, ahora tenemos que activar los cinco interruptores en poco tiempo. Empezamos por el de la cocina, seguimos por el de la sala de torturas, subimos a la planta baja y activamos el del jardín y el del cementerio, subimos al relicario y activamos el de la calavera. Volvemos a bajar a la planta baja y vamos a la sala donde están los talismanes, detrás del comedor y de la cocina, al sur de la planta. Gracias al martillo que cogimos de la celda del Sumo Sacerdote, se extiende una pasarela para llegar a los talismanes, y gracias a la activación de los interruptores, podemos acceder al interruptor que abre la reja de los talismanes. Nos ponemos delante de ellos, pero mirando hacia el techo, para no intentar cogerlos, y usamos el pergamino de la oración. Cuando los volvamos nos quitemos la oración de delante, ya no estarán protegidos y los podremos coger sin dañarnos. También sonará la alarma. Ahora sólo nos falta salir por la puerta principal, por el jardín o por el cementerio, saltando desde el balcón de la planta superior al exterior.