China ya juega su papel en la guerra de Ucrania

La invasión de Ucrania por parte de Rusia cumple 12 días y aunque cada día que pasa la catastrófe humanitaria es mayor, los diferentes países toman posiciones en la guerra de Ucrania, participando de varias maneras en el conflicto. Es el caso de China, que aunque hasta ahora había mostrado una posición ambigua, ha asegurado que ya está tomando posiciones para mediar entre Gobiernos.

El ministro de Exteriores de China, Wang Yi, ha revelado este lunes que el país asiático "ya está mediando" en el conflicto y ha remarcado los esfuerzos que se están haciendo para ofrecer asistencia humanitaria. "Hay que promover la paz y el diálogo y China ya ha hecho algunos esfuerzos al respecto. Ha habido dos rondas de negociaciones y esperamos que haya una tercera", ha dicho.

"Cuantas más divergencias, mayor es la necesidad de sentarse a negociar", ha continuado Wang Li, que ha descrito el papel que puede jugar China en la guerra. "China está dispuesta a seguir jugando un papel constructivo a la ahora de facilitar el diálogo y trabajar con la comunidad internacional cuando la situación lo demande", ha agregado.

Estados Unidos tiene un plan

Mientras China confirma su mediación en la guerra, Estados Unidos se preparan para una guerra que se prevé larga. Desde la Casa Blanca se empieza a asumir que el conflicto durará más de lo previsto (en el Pentágono incluso hablan de entre 10 y 20 años) y por eso ya planean un Gobierno de Ucrania liderado por el actual jefe Volodímir Zelenski desde el exilio mientras Moscú ataca el país.

Por el momento, Zelenski continúa en Kiev, como símbolo de la resistencia de la población e incluso ha descartado salir del país, como así se lo han ofrecido en los últimos días. Sin embargo, los países occidentales, liderados la administración de Joe Biden, moldean un plan en el que Zelenski estaría en el exilio. Según explica The Washington Post, citando a altos funcionarios europeos y estadounidenses, el líder ucraniano dirigiría las operaciones de guerrilla desde fuera del país.

Pero mientras la comunidad internacional da pasos para intermediar en la guerra, Rusia ha redoblado este lunes la ofensiva sobre varias ciudades de Ucrania, incluida Járkov, la segunda más grande del país, así como bombardeos en las proximidades de Odesa, a orillas del Mar Negro, y una ciudad considerada estratégica por tener uno de los puertos más importantes del este de Europa.

Según ha informado la administración regional militar ucraniana, las fuerzas rusas han lanzado un bombardeo de artillería pesada contra Mykolaiv, una ciudad muy próxima al Mar Negro y ubicada entre Jersón, ya conquistada, y Odesa, uno de los principales objetivos de las tropas. Por su parte, en Járkov los ataques se han producido con el objetivo de tomar un complejo deportivo de una universidad local así como varios edificios civil.

Asimismo, la noche tampoco ha tenido descanso en Kiev, la capital, donde Rusia ha intensificado su asedio, y en Mariupol, donde se ha impedido la evacuación de la población. El presidente ruso, Vladimir Putin, ya advirtió este domingo que los ataques no se detendrían salvo que el Gobierno de Ucrania abandone la resistencia.

Evacuación de civiles

Sin embargo, mientras Rusia intensifica sus ataques, al mismo tiempo las fuerzas rusas han admitido que estamos en una "catastrófica situación" y por eso han anunciado la apertura de corredores humanitarios a partir de las 07.00 GMT (8.00 hora española) en las ciudades ucranianas de Kiev, Mariupol, Járkov y Sumi, según han informado las propias fuerzas armadas rusas a la Cruz Roja, la OSCE y la ONU, según informan las agencias rusas.

"Ante la catastrófica situación humanitaria y su fuerte agravamiento en las ciudades de Kiev, Járkov, Sumi y Mariupol las Fuerzas Armadas con fines humanitarios a partir de las 10.00 horas (08:00 horas en España) del 7 de marzo de 2022 anuncian un régimen de silencio y abren corredores humanitarios", indica el comunicado de las tropas, publicado por las agencias rusas.

Así serán los corredores humanitarios

El corredor desde Kiev pasará por las ciudades de Gostomel, llegará Chernóbil y las localidades bielorrusas de Gden y Gomel. Por su parte, desde Mariupol la evacuación se hará por dos vías. La primera ruta irá desde Mariupol hasta Rostov del Don, ya en suelo ruso. La segunda llegaría hasta Mangush, en la cuenca del Donetsk. Por su parte, la ruta de Járkov llegaría hasta Belgorod, en Rusia y la última, desde Sumi tendría también dos rutas, una hasta Belgorod y otra hasta Poltava, aún en suelo ucraniano.