CORONAVIRUS

La estrategia radical de Israel para terminar con Ómicron

Las autoridades sanitarias del país valoran la posibilidad de promover un "modelo de contagio masivo" para alcanzar la inmunidad colectiva ante el coronavirus.

NIR ELIAS

El imparable avance de la variante Ómicron podría llevar a las autoridades de Israel a dar un giro radical en su estrategia para contener el coronavirus. Los importantes datos en la vacunación, con casi 6 millones de personas con las dos dosis y 4,2 millones inoculados con la tercera en un país de cerca de 9,5 millones de habitantes, han llevado a plantear la posibilidad de promover un "modelo de contagio masivo".

El hecho de que la nueva variante cause una enfermedad leve en la mayoría de los casos y la dificultad para detener su avance son factores que han hecho que se estudie la idea de llevar a cabo un planteamiento que incluiría la eliminación de las restricciones. El objetivo sería alcanzar la inmunidad colectiva a través de contagios masivos de Ómicron.

Al borde una "tormenta de infecciones"

Hasta el momento, el aumento de los positivos a causa de la nueva cepa del coronavirus no ha supuesto un incremento de las hospitalizaciones y los casos graves en un país en el que la campaña de vacunación se ha desarrollado con éxito. Además, Israel ya ha autorizado administrar la cuarta dosis a inmunodeprimidos y las personas mayores en residencias y hospitales geriátricos para aumentar su protección ante Ómicron.

El primer ministro israelí, Naftali Benet, advirtió esta semana que el país está al borde de una "tormenta de infecciones cuya magnitud aún no hemos visto" y advirtió de que "mucha gente se va a infectar" con la variante Ómicron sin que se pueda hacer nada por impedirlo. "La tormenta sucederá. No podemos evitarlo", añadió.

Baja incidencia en los hospitales

Esta situación ha sido decisiva para que los expertos del Ministerio de Sanidad estén sopesando un cambio de política en la lucha contra la pandemia con el fin de conseguir la ansiada inmunidad de rebaño ante la COVID-19 en un momento en que Ómicron, variante caracterizada por su alta capacidad de transmisión, se ha convertido en predominante.

Los últimos datos notificados por las autoridades de Israel muestran que actualmente más de 22.700 personas están infectadas y menos de un centenar hospitalizadas en estado grave. El ratio de infección (el promedio de personas a las que infecta cada portador del virus) se mantiene en el 1,6% y el índice de positividad en un 3,8%, el mayor desde octubre, como recoge la agencia EFE.