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El Gobierno pone fecha a la vacuna española

La ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant, augura que, si los ensayos clínicos prosperan, el fármaco podría estar listo para principios de 2022.

Hospital Clinic de Barcelona

Pese a que España está cerca de alcanzar su objetivo de administrar la pauta de completa de la vacuna contra la COVID-19 al 70% de su población, los científicos de nuestro país continúan trabajando para desarrollar vacunas nacionales que puedan contribuir a la lucha contra la pandemia. De todas las que están en proceso, hay una que la ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant ha querido destacar durante una entrevista con El Periódico: "La vacuna de Hipra, que ahora mismo es la más avanzada, presenta buena respuesta frente a todas las variantes y, además, se conserva a temperatura de nevera, por lo que se facilita mucho la logística".

La empresa farmacéutica española Hipra ha comenzado esta semana la fase I/II de su vacuna, y Morant estima que se podría estar lista en menos de seis meses. "Si los ensayos clínicos prosperan, la compañía tendría capacidad de producir a finales de año y podríamos comercializar una vacuna española a principios de 2022", ha precisado.

Desarrollo del ensayo

Esta vacuna es un preparado proteico que simula una parte del virus y, cuando entra en el organismo, genera una respuesta inmunitaria que "queda como recuerdo", por lo que "si en algún momento el virus accede a nuestro cuerpo, tendremos defensas para actuar rápidamente y protegernos de la infección o de un cuadro clínico grave", explicó el viernes en rueda de prensa Rafael Ramos, investigador del Instituto de Investigación Biomédica de Girona Dr. Josep Trueta (IDIBGI).

Más de 400 personas se presentaron voluntarias para participar en esta fase I/II del ensayo clínico, que sirve para comprobar la seguridad y eficacia del fármaco. De ellas, la compañía seleccionó los 30 participantes definitivos, de los que seis ya han recibido la vacuna. "La respuesta de las personas ha sido impresionante. No esperaba que tuviéramos tanto éxito", expresó Lorna Leal, investigadora principal del estudio y especialista del Servicio de Enfermedades Infecciosas del Clínic.

A los 30 voluntarios, a quienes se recomienda evitar "situaciones de riesgo" para no contagiarse durante el proceso, se les administrarán dos dosis de la vacuna separadas por 21 días, por lo que se ha escogido el suero de Pfizer como alternativa a Hipra para poder encajar los periodos de inoculación. De esta forma, cinco participantes serán inmunizados con Pzifer y los otros 25 se dividirán en tres grupos que recibirán distintas dosis de Hipra para determinar también la cantidad de suero ideal de cara a las próximas fases. Ni los participantes ni los investigadores sabrán que vacuna se ha utilizado en cada caso.

Lucha contra negacionistas

Gran parte de la ciudadanía ha accedido a vacunarse contra la COVID-19, pero también hay muchas personas que siguen mostrando una postura negacionista hacia la pandemia. "El discurso negacionista, que pone en duda a la ciencia, ha tenido un momento de oportunidad porque, inmersos en la pandemia, era el tema del que se hablaba y en ese contexto han tenido la oportunidad de colar su mensaje", reconoce la ministra. Sin embargo, asegura que este ha sido "desmontado y ampliamente superado por el de la información y la evidencia científica". "Tenemos un país con una altísima tasa de vacunación y eso responde a la confianza de la ciudadanía en la evidencia científica y en la ciencia", ha reflexionado.

Inversión en ciencia

Por último, Morant ha asegurado que "España ha invertido más de 100 millones de euros en investigación sobre COVID-19" solo en el ámbito público, desde donde se han apoyado 200 líneas de investigación y 100 proyectos de capacitación industrial. Además, ha apuntado que el Gobierno trabaja para "recoger el máximo consenso posible para que la ley de la ciencia salga adelante". En este sentido, ha lamentado que España se encuentra por debajo de los umbrales europeos, tanto en cantidad de científicos como en lo que respecta a salarios.

"Vamos a fortalecer tanto económicamente como en recursos las infraestructuras y los centros de investigación. Todo esto se va a hacer a través de herramientas que den estabilidad a las carreras científicas. Vamos a seguir avanzando en la ley de la ciencia, que también es un clamor ciudadano. La ciudadanía exige que aumentemos la inversión en ciencia e innovación y que nos igualemos a las tasas europeas. Ese es el gran objetivo", ha señalado.