CORONAVIRUS

Tanzania detecta la "variante más mutada jamás encontrada"

Luke Dray

Según un informe, esta nueva variante contiene 10 mutaciones más que cualquier otra, aunque no se sabe su gravedad o capacidad para escapar a los anticuerpos.

Los científicos de Tanzania piden al Gobierno un mayor monitoreo de la COVID-19 tras detectar la "variante más mutada jamás encontrada" en varios viajeros del país. Un informe presentado a la Organización Mundial de la Salud (OMS) y organismos regionales muestra que esta variante tiene 10 mutaciones más que cualquier otra, según Tulio de Oliveira, director de Krisp, un instituto científico que realiza pruebas genéticas para 10 países africanos.

Krisp ya descubrió el año pasado la variante sudafricana (501Y.V2) que disparó los contagios en el país y demostró ser más infecciosa y capaz de escapar a los anticuerpos. De momento, no está claro si esta nueva variante, encontrada en viajeros que habían llegado a Angola desde Tanzania, es más infecciosa o grave que otras variantes. Eso sí, "es potencialmente de interés", aseguró De Oliveira en una entrevista ofrecida el viernes a Bloomberg. Por ello, será cultivada en los laboratorios del Krsip, con lo que también se pretende aclarar si puede evadir los anticuerpos.

Tanzania, un país negacionista

Desde que comenzó la pandemia, Tanzania se erigió como el país negacionista de África. Mientras el resto del continente impuso medidas rápidas y severas para contener la COVID-19, confinamientos estrictos y cierre de fronteras, este país decidió en mayo dejar de contabilizar las cifras derivadas de la enfermedad, con lo que es prácticamente conocer el alcance real del virus. Estas se congelaron en 509 contagios y 21 fallecidos.

Además, en junio de 2020, el recientemente fallecido presidente, John Magufuli, declaró el país "libre de COVID-19". Desde entonces, él y otros altos funcionarios del Gobierno se han burlado de la eficacia de las mascarillas, han cuestionado que las pruebas de detección funcionen y se han reído de los países vecinos que imponían restricciones.

Asimismo, el mandatario advirtió a sus ciudadanos en enero del peligro de las vacunas, mientras que les instaba a rezar y usar la inhalación de vapor y medicamentos a base de hierbas, de los cuales ninguno había sido aprobado por la OMS como tratamiento. "Las vacunas son peligrosas. Si el hombre blanco fuera capaz de crear vacunas debió haber encontrado una para el sida, para la tuberculosis, para la malaria, para el cáncer", manifestó en declaraciones recogidas por The Citizen. "Hemos vivido más de un año sin el virus porque nuestro Dios es capaz y Satanás siempre fracasará. El Ministerio de Sanidad debe tener cuidado y evitar la tentación de convertirnos en un país donde los ensayos con vacunas se llevan a cabo con libertad", añadió.

El pasado 17 de marzo, Magufuli falleció de forma inesperada a los 61 años por un supuesto problema cardíaco, según anunciaron las autoridades del país, mientras que la oposición asegura que fue por coronavirus. El viernes fue enterrado en Chato, su pueblo natal. Su sucesora es Samia Suluhu Hassan, que ha hecho historia al convertirse en la primera mujer de la historia del país africano que alcanza la jefatura de Estado. Tiene ante ella el difícil cometido de decidir si continúa con la criticada gestión de la pandemia realizada por su predecesor o si cambia la estrategia.