Un rebrote en Alemania desata la xenofobia contra los musulmanes

Un complejo de viviendas en la ciudad de Gotinga, en el centro de Alemania, donde viven cerca de 700 personas, es el foco de un rebrote de coronavirus. A finales de mayo, la ciudad reportó que 36 personas se habían contagiado y puso en cuarentena a cerca de 300. Muchos de los infectados viven en el mencionado complejo. El rebrote tuvo como epicentro un bar que no debía estar abierto, y su origen coincidió con las celebraciones por el fin del Ramadán, el mes sagrado de los musulmanes.

En la ciudad, varias personas piden que se impida a los residentes del conjunto de viviendas que salgan de sus casas por temor a que el contagio se expanda. Sin embargo, la concejala de la ciudad Pietra Broistedt, a cargo del comité de gestión de la crisis del coronavirus, se opone a esa posibilidad: "No podemos poner una cerca y alambre de púas. Esto no es una prisión".

En el estacionamiento subterráneo del edificio fue instalado un centro móvil de pruebas, donde médicos y estudiantes de medicina han realizado exámenes a los residentes. Muchos de quienes viven en el complejo de viviendas son personas que en la década de los noventa llegaron a Alemania tras huir de la crisis de Kosovo.

El rebrote también ha sido aprovechado por el partido ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD), que ha intentado sacar rédito político. A través de sus redes sociales, la formación aseguró que el contagio es resultado del comportamiento "claramente provocador e ignorante de los clanes árabes".

Mientras tanto, algunos residentes del complejo de viviendas aseguran que están siendo culpados por el rebrote, y que cuando van por la calle les miran de manera sospechosa o escupen al suelo a su paso.

Alemania abrirá sus fronteras el lunes, pese a las dudas

El Gobierno alemán mantiene el objetivo de reabrir sus fronteras al turismo de sólo a países europeos (menos España y Noruega) con la retirada del aviso de no viajar al extranjero. Sin embargo, mantiene la atención en la evolución de la pandemia o de posibles repuntes de contagios.

Pese a las dudas, el ministro de Asuntos Exteriores, Heiko Maas, ha celebrado este jueves el hecho de que la actual situación que vive su país es mejor que la que se imaginaba hace apenas un mes. Sin embargo, ha matizado: "Estamos todos de acuerdo en que no podemos poner imprudentemente en peligro lo que hemos logrado con tanto esfuerzo".