CORONAVIRUS | TURISMO

Confort en un entorno de seguridad en los hoteles

Denis Doyle

El Instituto para la Calidad Turística Española coordina una guía con un protocolo higiénico-sanitario. El aforo será flexible siempre que se asegure el distanciamiento

Aún quedan algunas semanas para que las restricciones de movilidad permitan activar el flujo de turistas, pero los hoteles y el sector en su conjunto se preparan para el momento en que puedan recibir clientes. El Instituto para la Calidad Turística Española (ICTE) está coordinando la elaboración de guías de "medidas para la reducción de riesgos higiénico-sanitarios frente al COVID-19" para los diversos actores del sector. Una tarea ímproba que les ha encomendado la Secretaría de Estado de Turismo para trasladar luego a Sanidad.

Hoteles y apartamentos ya tienen su hoja de ruta. La experiencia de alojarse en ellos resultará este verano algo distinta para los clientes desde la misma llegada. "Ya no nos recogerán el coche; y las maletas sólo nos las llevarán si están debidamente protegidas o desinfectadas", explica a AS el presidente del ICTE, Miguel Mirones, quien añade que encontraremos al recepcionista protegido con una mascarilla o una mampara. Tarjetas o llaves se desinfectarán cada vez que se depositen en recepción.

Los huéspedes no sólo encontrarán diferencias en las relaciones humanas. Mirones describe unas habitaciones "un poco diferentes, porque habrá menos componentes de materiales textiles". "No habrá alfombras, se reducirán los cojines... Todo para facilitar la limpieza y desinfección". En el baño es probable que no haya lo que en el sector llaman amenities (jabones y geles). Y habrá un sistema de desinfección de todos los enseres, incluido el secador. Y en el restaurante habrá que llamar para reservar o establecer turnos.

El plan hace de la flexibilidad un valor fundamental para adaptar las medidas a las condiciones particulares de cada hotel, como el espacio disponible en recepción o los ascensores. "Se va a constituir un comité de gestión que va a analizar el riesgo en cada negocio y proponer un plan de contingencia con unos mínimos y preocuparse de su aplicación". También determinará los aforos, pero con flexibilidad. "No es cuestión de limitarlos, sino de asegurar el distanciamiento. Cada hotel es un mundo", expone Mirones.

El documento elaborado por el ICTE contempla cómo organizar el funcionamiento de lugares críticos como los espacios comunes. Se podrá usar la piscina, pero habrá "un sistema de distanciamiento entre hamacas y de circulación de personas", avanza Mirones. "Si quieres ir al spa, se tendrán que cumplir las normas específicas para balnearios". El objetivo final es "prestar el servicio con el mayor confort, algo que siempre ha caracterizado al turismo español, procurando un entorno de seguridad".

Guías para todo el sector turístico español

El trabajo del ICTE no se limita a hoteles, sino que abarca a todo el sector. "Tiene que ser así porque de nada valdría que hiciéramos protocolos sólo de hoteles o de restaurantes, y no se previese lo que hacen los turistas cuando salen del hotel", recalca Miguel Mirones. Ya se han presentado los borradores de las guías que recogen las medidas para albergues y hostels, alojamientos rurales, guías de turismo, campings, restaurantes y agencias de viajes. También habrá para museos, parques naturales y temáticos, puertos deportivos, lugares de ocio nocturno, campos de golf... Así hasta 21 guías. "Toda la cadena de valor, porque si no los riesgos podrían estar saltando". Más de 450 personas (participan patronales, sindicatos y administraciones) trabajan en tenerlas listas en tiempo récord.