Sobre las 22:00 horas del 8 de marzo, el Kirolbet Baskonia se despedía de su público tras ganar al Iberostar Tenerife (75-58). En ese momento, nadie sabía que el baloncesto y el mundo vivirían un parón de varios meses por una pandemia. Youssoupha Fall, desde el tiro libre, sumó los últimos puntos en tres meses, momentos después de que Fran Guerra anotara la última canasta en juego.
101 días después de aquello, el baloncesto vuelve en La Fonteta: 12 equipos, 14 días y 33 partidos para dirimir quién es el campeón de la temporada más atípica. Entre aquel Baskonia-Iberostar y el Barça-Joventut que abrirá la fase final de Valencia el 17 de junio (15:30) ha habido una lucha contrarreloj para reanudar la temporada. El 20 de abril, la ACB anunció el nuevo formato: los doce primeros, divididos en dos grupos, y semifinales y final a partido único. Un mes después, el 27 de mayo, se conocían la sede (Valencia) y las fechas: del 17 al 30 de junio.
“Será una competición rara, como una Copa del Rey más larga”, avisaba Dusko Ivanovic, técnico de un Baskonia que quiere reinar en España una década después de aquel 2+1 de Fernando San Emeterio que tumbó al Superbarça. El equipo vitoriano y el Valencia Basket, que juega en casa (todos los partidos serán en La Fonteta), han sido los últimos en romper el duopolio del Madrid y el Barcelona, cinco y tres títulos, respectivamente, desde 2011. Ambos esperan que este formato exprés pueda benefiarles. El Valencia ha perdido a Guillem Vives (fractura en el dedo de una mano) y el Baskonia, a Semaj Christon, incapaz de regresar desde Estados Unidos.
El Barcelona tiró la casa por la ventana el pasado verano y, con la Euroliga cancelada, la Liga Endesa es la última bala que le queda para no firmar una temporada en blanco (la Supercopa y la Copa las ganaron los de Laso). Los de Pesic llevan un lustro sin ganar el título nacional. El último fue en 2014: sólo Ante Tomic y Álex Abrines, en su primera etapa en el club azulgrana, sobreviven de aquel equipo. El principal problema para el conjunto catalán está en el puesto de base. Kevin Pangos y Thomas Heurtel llegan a la fase final de Valencia, pero con siete partidos entre los dos por las lesiones. Malcolm Delaney, que ha llevado el peso en la dirección del equipo durante toda la temporada, no estará. El base se marchó a EE UU en marzo y ha roto con el Barcelona enfadado porque no le hubieran ofrecido la renovación durante la pandemia.
El Madrid, experto copero en la era Laso (seis títulos en nueve años), parte con algo de ventaja en esta liga exprés. En primer lugar, porque su plantilla se conoce de memoria y en segundo, porque ha recuperado efectivos: Llull estaba lesionado allá por marzo, pero ya se encuentra al cien por cien. Además, al contrario que otros equipos, no ha sufrido ni ‘fugas’ ni contratiempos en forma de lesión.
DAVID GRAU LLINARES / ACB PHOTO
El parón le llegó al Unicaja cuando se preparaba para los cuartos de la Eurocup. El equipo malagueño tenía mucha ilusión puesta en el torneo continental porque era su llave a la Euroliga. Con la competición cancelada y un billete para la próxima Eurocup asegurado, afronta este torneo con el objetivo de redondear un buen año, en el que también ha disputado la final de la Copa del Rey. Para ello confía en un juego exterior con grandes tiradores: Bouteille, Mekel, Brizuela, Adams...
Peor pintan las cosas para el Casademont Zaragoza, el más tocado por la pandemia. En primer lugar, Jason Thompson y DJ Seeley, dos de sus mejores jugadores, se convirtieron en los primeros en romper con la Liga Endesa. Y días después Fran Vázquez anunció que ponía punto final a su carrera en ese mismo momento, que no esperaría a la fase final. Por lo tanto, muchas ausencias para un equipo que marchaba tercero en el parón, sólo con Barcelona y Real Madrid por delante.
Y en la misma línea está el Joventut con Luke Harangody y Tony Wroten, fuera de la disciplina verdinegra tras romper sus contratos. La Penya, fiel a su filosofía, tirará de cantera (han viajado siete canteranos) y de Klemen Prepelic, cedido por el Real Madrid y máximo anotador de la temporada (22,3 tantos). El San Pablo Burgos, con otra baja importante (Earl Clark), será el nuevo destino de Pablo Aguilar tras la pandemia. El equipo burgalés pretende que su tercera temporada en la élite sea el de su consolidación. El otro equipo revelación es el Retabet Bilbao que ha pasado, en solo un año, de pelear por el ascenso a ser el ‘matagigantes’ de la Liga.
El MoraBanc Andorra soñó con organizar esta fase final, pero le toca jugar como visitante. Ibon Navarro reconoció que no llegan en el mejor momento (“Nuestras sensaciones eran mejores hace diez días”) y ha perdido por el camino a Moussa Diagné, su gran referente en la pintura. Por último, los dos canarios. El Herbalife Gran Canaria se cuela en esta fase final tras una temporada llena de altibajos. Mejor le han ido las cosas al Iberostar Tenerife con una plantilla renovada (el veterano es Tomasz Gielo, que sólo había disputado un partido con el club) y la pareja de moda: Marcelinho Huertas y Giorgi Shermadini.
Emilio Cobos / ACB Photo
Doce equipos que luchan por ganar la temporada más atípica de la historia y una liga exprés repleta de incógnitas: ¿A quién favorece más este formato? ¿Los jugadores están física y mentalmente preparados para la vuelta? ¿Cómo serán los partidos sin público? El baloncesto vuelve en Valencia, pero con asterisco.
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