El MoraBanc Andorra, tras alcanzar la semifinal de la Copa del Rey y ocupar la sexta plaza cuando llegó el parón, había planificado a conciencia la fase final de la Liga y mantuvo hasta el final sus opciones de ser sede de la misma.
Ibon Navarro sufrió un duro golpe la pasada semana al perder a uno de sus jugadores franquicia, el pívot senegalés Moussa Diagné, su máximo anotador (11,5 puntos y 6,1 rebotes de media). Los médicos le recomendaron que parara por unas molestias en la pierna izquierda, que podrían haber derivado en una fractura por estrés. Tampoco llega a la cita Dejan Musli. El MoraBanc se ha reforzado con Tudbe Olumuyiwa, que formará el juego interio junto a Nacho Llovet, el francés Bandja Sy y el hispano-dominicano Tyson Pérez.
Con el déficit exterior por la baja de Diagné y la duda de Musli es evidente que el papel del base estadounidense Clevin Hannah será fundamental con Jeremy Senglin y Guillem Colom como relevos. Desde el perímetro exterior tanto David Jelinek como Dejan Todorovic son serias amenazas para los rivales, mientras que David Walker y el haitiano Franz Massenat son puntas de lanza en una plantilla compensada y capaz de todo.
A sus 32 años el base neoyorquino con pasaporte senegalés, fichado esta temporada, ha respondido a las expectativas. Es el máximo anotador y pasador del equipo (12,1 puntos y 3,6 asistencias). Con experiencia en seis ligas europeas, en España ha jugado en el Joventut, Bilbao y Gran Canaria. Marca el ritmo de los partidos y es el catalizador ofensivo de la escuadra andorrana.