El Casademont Zaragoza resurgió la pasada temporada en la Liga Endesa tras sufrir las dos últimas. De luchar por la salvación (en algunos momentos con demasiado peligro real), los aragoneses se lucieron el último curso con una mezcla de veteranía y juventud, experiencia e ilusión, para alcanzar el playoff por primera vez en seis años, y las semifinales por el título por segunda vez en su historia tras dejar en la cuneta de los cuartos de final al aparentemente intratable Baskonia.
Y todo eso bajo la batuta de Porfirio Fisac, que en sus últimas etapas en ACB convierte todo lo que toca en oro: el Gipuzkoa realizó una soberbia campaña en 2018 y en 2019 fue el turno de este Zaragoza, que un año más se ha renovado. Es la realidad de los medianos y pequeños de la Liga Endesa. La reinvención de un curso a otro es ley de vida… al igual que las salidas de sus principales estrellas. Stan Okoye y Bo McCalebb, máximo anotador y asistente la campaña anterior, respectivamente, han dejado el equipo este verano. Al igual que veteranos como Nacho Martín y multiusos como Berhanemeskel.
Pero eso no impide que el Zaragoza haya configurado un conjunto de garantías para afrontar los retos del futuro, entre ellos, la vuelta a las competiciones europeas después de tres años de ausencia. Lo hará en la Basketball Champions League, la tercera competición continental, de la mano del canterano Carlo Alocén. El joven base, ya internacional con España, es una estrella en ciernes cuyos derechos pertenecen al Madrid desde este verano. En este nuevo proyecto del Casademont también destacan las vueltas de Rodrigo San Miguel y el alemán Robin Benzing.
Porfirio Fisac (Fuenterrebollo, Segovia) es un veterano en los banquillos españoles. A sus 54 años, el técnico lleva en la carretera desde 1998 cuando empezó en la Liga EBA con el Peñarroya. Desde ahí, un lento avanzar hasta alcanzar la ACB con el Gipuzkoa. En San Sebastián hizo una de sus campañas más brillante (2017-18) antes de pegar un golpe de autoridad el curso anterior con el Zaragoza, con quien renovó este verano: alcanzó la cuarta plaza de la Liga Endesa con un equipo hecho desde cero.
El mejor joven de la pasada temporada en la Liga Endesa es un chico precoz: se convirtió en el primer jugador nacido en el siglo XXI (30 de diciembre de 2000) en debutar con la Selección. Fue, además, el cuarto más joven de siempre en vestir la camiseta de España. Alocén, que se estrenó con el Zaragoza en ACB con 15 años y 10 meses, es el líder de la nueva Generación del 2000 y cerró un gran pasado un año: disputó 37 partidos de Liga con una media de 16 minutos para 5,4 puntos y 2,4 asistencias.
Robin Benzing (Seeheim-Jugenheim, 1989) vuelve a casa. El alero alemán (2,08 m), que jugó en el Zaragoza en la 2015-16 y en la 2016-17, aterriza en el Príncipe Felipe tras vestir la camiseta del Besiktas turcos la pasada temporada. El alero (aunque también puede desempeñar la función de ‘cuatro’) disputó el Mundial de China con su selección: 8 puntos y 3 rebotes en 20 minutos de media sobre la cancha. En sus dos campañas en el Casademont promedió 12,1 tantos y 2,8 capturas para 10,6 de valoración.
| ALTAS | CONTINÚAN | BAJAS |
| V. Krejci (sube al 1º equipo) | F. Vázquez | B. McCalebb |
| N. Brussino (Tenerife) | C. Alocén | J. Berhanemeskel |
| T. Hlinason (Obradoiro) | 3 años | J. Justiz | M. Martí (Lleida) |
| R. San Miguel (Tenerife) | 3 años | N. Radovic | N. Martín (Betis) |
| R. Benzing (Besiktas) | 1 año | R. Seibutis | L. Williams |
| D.J. Seeley (Medi Bayreuth) | 1 año | J. Barreiro | F. Santana (Gran Canaria) |
| S. Okoye (Gran Canaria) |
¿Cómo ve al Casademont Zaragoza esta temporada?
Pep Cargol, director técnico del Zaragoza. Alfonso Reyes (DIARIO AS)
El equipo está cerca de completar una pretemporada atípica porque la llegada hace poco de los jugadores que han disputado el Mundial ha condicionado la preparación. Llegamos al primer partido con las ganas de competir y con mucha ilusión.
¿Qué nueva incorporación hará vibrar al Príncipe Felipe?
Una cosa muy importante dentro de este equipo es que no tenemos personalismos, el colectivo prima por encima de todo. Si el año pasado conseguimos terminar cuartos en ACB fue por ese trabajo colectivo. Y vamos a seguir por ese camino. No es tanto que vaya a destacar un jugador u otro porque en el nivel tan alto que hay en la ACB eso no es suficiente. Todos debemos competir al máximo.
¿Cuáles son los objetivos del equipo?
Mantener la línea de lo que era nuestro objetivo el año pasado: una identificación total entre el equipo y la afición. Que la gente se identifique con lo que ve sobre la cancha. Y, desde ahí, competir en todos los partidos dentro de las competiciones que disputamos. Nuestra primera responsabilidad es la ACB. En Europa, llegar hasta donde podamos sin perder de vista la Liga Endesa, que es de la que dependemos.
