Un penaltito, que diría Ancelotti, que no saldrá en el vídeo

Los editores de Real Madrid TV guardarán en algún cajón de Concha Espina -al menos hasta nueva ocasión- el vídeo de los errores de Hernández Hernández, ese que emitieron casi en bucle durante la jornada del viernes. Y no hace falta decir qué si algún día vuelven a emitirlo, no se incluirá el penalti señalado sobre Casemiro. El colegiado interpretó mucho más de lo que pasó, que no era suficiente para tal castigo, un “penaltito” que diría Ancelotti. O ni eso.

El protocolo dirá que el VAR no podía decirle al colegiado que revisara la jugada y el error del canario rompió un partido que dominaba el Real Madrid, pero cuya primera mitad agonizaba con 0-0. El Valencia luego encajó tres más y, como dijo Gayà, “cuando te meten cuatro, pocas excusas puedes poner”. Pero el Valencia denunció en sus redes oficiales causa-efecto en la presión ejercida desde el club blanco, hablando de “robo” en Twitter. Ese vídeo en bucle es lo que tiene, es tan pernicioso como peligrosa la acusación che. Lamentables ambos.

El partido lo condiciona esa jugada y también el error en cadena de la zaga en el 2-0. Ahí el Valencia se fue definitivamente del partido, en el que entró muy bien, la verdad, aunque se metió tanto en la cueva que el cántaro se rompió. Ahora el vestuario de Bordalás tiene que pasar página de lo sucedido en el Santiago Bernabéu, que lo sucedido no le deje más secuelas que la derrota en sí, y centrarse en lo que tiene que corregir. Porque, penaltitos al margen, encajando 32 goles en 19 jornadas, difícil estar arriba. La ventana de enero está para eso. 

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