Pánico del Inter al Bernabéu

Gustó el Inter por momentos, pero perdió ante el Madrid como casi siempre. En la historia del conjunto interista está el Bernabéu escrito en letras de oro y brillantes. Allí ganó su última Champions, aquella en la que con Mourinho coronó un año inolvidable. Lo ganó todo ese Inter. Pero la realidad es que a nivel de partidos sueltos su rendimiento en el feudo blanco es bastante pobre. Siempre le pasa algo.

Expulsiones, fallos, lamentos… No hay partido ante el Madrid que no se argumente para el Inter desde la desgracia. El curso pasado fue la expulsión de Vidal; este, la de Barella. El pase a octavos estaba asegurado, pero la roja a uno de sus jugadores más determinantes y la correspondiente sanción (no jugará los octavos) la afean de forma imprevista. Al Inter le faltó mordiente, otra de sus cruces cuando afronta un partido grande. Está dando pasos importantes con Simone Inzaghi como para pelear la Serie A, pero la Champions aún le queda grande.

Los cambios en la plantilla han sido sustánciales respecto al conjunto campeón de Italia que dejó Conte. Las ventas de Achraf o Lukaku supusieron millones en las arcas, aunque son difíciles de contrarrestar. Llegaron Dumfries, Çalhanoglu y Dzeko, sobre todo. Son buenos futbolistas, nadie duda de ello, pero para la Champions se espera algo más. En el Bernabéu no brilló tampoco Lautaro, el elegido para liderar el proyecto del Inter más allá de sus fronteras. Parece un Inter condenado a la mediocridad en Europa.