Detalles

Dice la Real Academia de la Lengua (RAE) que la palabra ‘detalle’ tiene tres acepciones: 1-Relación, cuenta o lista circunstanciada. 2-Pormenor, parte o fragmento de algo. 3-Rasgo de cortesía, amabilidad, afecto, etc.

En los últimos tiempos estamos viendo o más bien oyendo, que el Real Valladolid ha perdido partidos ‘por detalles’. Si vamos a la primera acepción, la lista sería bastante larga. Si vamos a la segunda, habría que quedarse con la carambola que sirvió para que el Sevilla empatara con gol de su portero. Y si vamos a la tercera... esperemos que no sean detalles de cortesía hacia el rival precisamente.

 

Kodro recitaba el mantra (se ha convertido en un clásico) después del partido ante el Granada “estamos perdiendo por detalles” y no, no fue por detalles que se perdió el partido. Se perdió porque el equipo se vino abajo de forma descarada en la segunda mitad. Se perdió porque los rivales empiezan a oler la sangre cuando el Valladolid va por delante. Fue un compendio de lo que está pasando este año. Aunque para mí, el partido comenzó a perderse desde el primer instante, al no salir a por el rival. En ningún momento vi a un equipo que fuera capaz de mostrar al Granada la necesidad que le acucia en la tabla... más bien dio la sensación de ser un día más en la oficina... para algunos. Hay algunos avezados jugadores que están esperando que el Valladolid marque primero para lanzarse a las casas de apuestas y poner dinero a que no ganará... y alguno por ese mínimo detalle, estará ganando dinero.

 

Dice el proverbio que ‘si no tienes fútbol, échale ...’ y tiempo queda para hacerlo... si no hay otro argumento que parece que no hay demasiados, pero ese tiempo se acaba. Nunca me valió el ‘queda mucho’ lo repito hasta la saciedad. El Valladolid ha desperdiciado todas las oportunidades que le ha dado el calendario y ahora tendrá que apretar... los dientes para sumar lo que necesita e intentar ser el mejor entre los peores equipos de la Liga, aunque ya nada remediará el ser miembro de ese poco honorable club. Eso le serviría para salvar la categoría pero dejará una mancha difícil de borrar. De poco sirve mirar el calendario y pensar dónde se pueden sumar puntos, es el momento de lograrlo en cualquier sitio y ante cualquier rival. Pasó el tiempo de las excusas, de las lamentaciones... y de los detalles.