Dentro de un año serán otros Juegos

Los deportistas han aplaudido de forma unánime la inevitable decisión de aplazar los Juegos Olímpicos a 2021. La dramática pandemia que golpea al mundo no admite el mínimo debate sobre la conveniencia del traslado. Detrás del consenso, sin embargo, hay que entender que el movimiento de fechas no favorece a todos desde una perspectiva exclusivamente deportiva. La mudanza obliga a nuevas planificaciones y frena la estelar progresión que muchos de estos atletas y equipos llevaban hacia Tokio. Hay casos, y no sólo en España, de ilustres veteranos que se verán empujados a estirar su carrera durante otra campaña. “Hay que reprogramarlo todo. ¡Ojalá mi cuerpo aguante un año más!”, dijo la icónica nadadora italiana Federica Pellegrini cuando conoció la noticia. Y así, muchos.

El escenario español define la situación. Pau Gasol, de 40 años, aceleraba su recuperación para despedirse en los Juegos, donde su hermano Marc, de 35, iba a colgar la roja. Alejandro Valverde, de 40, apuntaba a los Juegos como meta, para dedicar 2021 a su adiós. Raúl Entrerríos, de 39, ha apurado su carrera hasta Tokio, donde los Hispanos, muchos de ellos treintañeros, querían saldar una cuenta pendiente. Sandra Sánchez, de 38, es la número uno mundial. Rafa Nadal, de 33, lucha por volver a serlo. ¿Seguirán en la cúspide? Mireia Belmonte, de 29, ya tiene una edad complicada para la natación. Algo parecido pasa con Saúl Craviotto, de 35, que aguantará otro curso para disfrutar como abanderado. Y con Gómez Noya, de 37. Y con Lydia Valentín, de 35… La edad condiciona, pero no es lo único. Los internacionales de hockey, un deporte amateur, tenían el permiso en sus trabajos para largas concentraciones, que ahora deberán replantear. Estas Selecciones llegaban de dulce, como las demás: baloncesto, balonmano, waterpolo… Dentro de un año no sabemos. Serán otros Juegos.