Gareth Bale no da para más
No da para más y es una lástima. Porque calidad tiene y planta y poderío más, y encima tiene retorno económico por la imagen suya que ha arraigado, sobre todo, en el mercado anglosajón (Estados Unidos e Inglaterra) y en Asia. Pero esta temporada ya se ha demostrado a las claras que Bale no es el hombre a quien se puede confiar un proyecto. Esta vez, sin estar a la sombra de Cristiano, que era su coartada perfecta, se ha demostrado que no le da ni el físico ni los galones. Es imposible que tire del carro un futbolista que después de seis años en España es incapaz de comunicarse en español con sus compañeros. El galés se ha empeñado, temporada tras temporada, en refugiarse en el golf y en no interactuar con los demás.
Seguro que Florentino Pérez se arrepiente ahora, tan inteligente hombre de negocios como es, de no haber vendido al galés cuando Mourinho lo quería para el United en 2017 y todavía cotizaba al alza. O igual no se arrepiente tanto, si piensa en el golazo de chilena que marcó en Kiev (al que unió otro) y que le dio la decimotercera para el Madrid. Ya no sirve de nada mirar hacia atrás. Mucho menos pensar en que Mbappé no está en el Madrid porque Bale no salió aquel verano y se veía sin sitio…
Ahora hay que mirar hacia el futuro. As informa de que el Madrid ya tiene decidido dar el sueldo de Bale (14 millones de euros tras su última renovación) a uno de los jugadores galácticos que están por venir. Hazard lo hará a buen seguro. Hay la intención de traer a otro entre Pogba y Mbappé. Se avecina un Madrid nuevo y en él ya no estará, muy presumiblemente, Gareth Bale, el galés que será recordado tanto por su calidad como por sus lesiones y su incapacidad para adaptarse a la vida en España.