Este título de Alejandro Valverde es muy merecido. Era probablemente su última oportunidad y, después de cómo acabó la Vuelta, mucha gente dejó de confiar en él. Pero los que hemos andado en bicicleta sabíamos que Alejandro siempre ha corrido la Vuelta a tope y luego siempre ha respondido en el Mundial. Este año, sabiendo que era perfecto para él, no iba a fallar. A eso se ha sumado su gran actuación, capaz de controlar la situación cuando los otros ciclistas que llegaron al final con él le han dejado toda la responsabilidad. Lo bueno es que todos llegaban al límite y no tenía que aflojar. Era su reto más ansiado y al final lo ha conseguido de una manera increíble.

También quiero destacar lo bien que ha estado la Selección y lo de cara que ha ido todo. Primero, con esa fuga que ha permitido que la carrera fuera tranquila cuando le convenía a los nuestros. Pero, a la hora de la verdad, todos han dado el máximo para controlar los ataques que se estaban produciendo y eso ha permitido que todo haya salido bien. Creo que habría que haber valorado bien este Mundial para España ganando el oro o no. La prueba es muchas selecciones es que llegaban aquí como favoritas, incluso más que España, no sólo no han conseguido metal, sino que apenas se les ha visto.