El clavo ardiendo de Batman

El Sevilla tiene nuevo entrenador, el tercero de la temporada, pero su aura deja este fracaso de gestión en segundo plano. De hecho, es el clavo ardiendo al que se agarra José Castro para conseguir que los nervionenses no vean la Europa League por la televisión el año que viene. Joaquín Caparrós, el Michael Keaton de Nervión, regresa a la que fue su casa como Batman regresó para librar a Gotham de las maldades del Pingüino. Cuatro partidos para cerrar su carrera como entrenador en la que fue su casa, antes de ponerse manos a la obra en los despachos y afrontar la revolución que el pasado verano se dejó a medias, algo que ahora se paga.

La pregunta es qué podrá hacer Caparrós con una plantilla muerta en lo físico y hundida en lo mental. Sus últimos precedentes en los banquillos no son nada halagüeños, pero es su Sevilla, aquel equipo al que llevó de Segunda a Europa, poniendo los cimientos que Juande Ramos se encargó de convertir en el edificio del mejor Sevilla de la historia. La plantilla es la que es y a Caparrós sólo le queda apelar al sevillismo y el amor propio de unos jugadores que tendrán que justificar su continuidad el año que viene ante uno de los principales responsables de la plantilla del curso 18/19. Es un clavo ardiendo, pero es el clavo del Batman de Utrera.

Lo más visto

Más noticias