Asensio y Zidane, las canilleras de Mesa y el 'prebenjamín' Isco

Marco Asensio y la ruleta de Zidane

El Espanyol se liberó con una victoria balsámica frente al Deportivo y Marco Asensio fue el símbolo de la alegría perica. Estaba siendo discutido por su poca incidencia en el rendimiento del conjunto de Galca. Su fútbol, eso sí, nunca perdió el rastro de desparpajo y verticalidad que le identifica. El nivel técnico del jugador cedido por el Real Madrid es sobresaliente. Dicen sus descubridores de él que ya hacía la ruleta de Zidane con diez años cuando militaba en el Playas de Calvià. La próxima temporada podría estar a las órdenes del entrenador galo.

El estreno de Isco en La Rosaleda

Volvía el hijo pródigo a casa. La ovación con la que La Rosaleda despidió a Isco fue estremecedora. Ha pasado mucho tiempo de las primeras carreras en el campo malacitano del de Arroyo de la Miel. Su primer partido ahí lo disputó con 5 años. ¡No era ni prebenjamín! Isco jugó con la escuela del Ayuntamiento de Benalmádena y selló un partidazo desempeñándose en la medular. “Yo estaba de coordinador en el fútbol base del Málaga y con 10, 11 y 12 años decíamos de ficharle. Imposible. Lo querían el Atlético, el Real Madrid, el Barcelona, el Valencia (por el que fichó)... Y el Málaga no tenía ni un duro”, rememoraba Paco Pineda en una entrevista con AS.

Parejo ratifica la opinión de Di Stéfano

Dani Parejo convirtió su sexto gol en Liga y confirmó la superioridad del Valencia en Granada. El centrocampista fue uno de los futbolistas más criticado durante la crisis ché. Su talento nunca se podrá discutir. Siempre estuvo considerado como una de las joyas de Valdebebas. Di Stéfano llegó a decir: “Si se va Parejo, no vuelvo a ver al filial a Valdebebas”. Palabra sagrada.

Las dudas de Wenger con Savic

La jerarquía de Savic gana peso en el Atlético de Madrid. El defensa montenegrino cuajó un partido digno de elogio ante el Villarreal y el Calderón se lo reconoció. La confirmación de un futbolista notable. Un día estuvo cerca de fichar por el Arsenal. Tenía 17 años y pertenecía al Borca. El club gunner le llamó para que probara durante dos semanas. A Wenger le entró rápidamente por los ojos. Sin embargo, la operación nunca cristalizó. El técnico galo se echó para atrás en el último momento. Seguro que más de una vez se habrá arrepentido de aquella decisión.

Verdú, el futbolista que sentó a Messi

El Levante tomó aire con una goleada solvente contra el Getafe. Verdú fue uno de los protagonistas del partido al marcar su primer tanto como jugador granota. El calor del gol no es algo desconocido para Verdú. Cuando jugaba en el filial del Barcelona, era el referente ofensivo actuando desde la mediapunta. Hizo 30 goles en tres temporadas. Tal era su importancia en el equipo dirigido por Pepe Gratacós que se ganó la titularidad por encima de un jovencísimo Messi. "Se veía que iba a ser un buen jugador, pero no se intuía el nivel que ha alcanzado", recuerda Verdú sobre el argentino.

Las 'canilleras' de Roque Mesa

La alabanza debe ser unánime. Las Palmas compitió de tú a tú con un Barcelona menor. Lo hizo desde el control del balón. El equipo de Luis Enrique sólo tuvo un 53% de posesión. La medular amarilla gobernó en muchas fases del encuentros con un Roque Mesa soberbio. La llegada de Setién ha catapultado al teldense, que ofrece pausa y criterio al fútbol canario. Roque, uno de los héroes del ascenso con su gol al Real Zaragoza, guarda una anécdota del día de su debut ante el Celta en la 2010-11. "Me dejé las 'canilleras' (espinilleras) en el hotel. Suerte que Aythami siempre lleva dos pares...", cuenta con rubor.

Jonny 'El Rectificador'

Jonathan Castro Otto, conocido por todos como Jonny, firmó ante el Eibar su primer gol en Primera tras 104 partidos. Un hecho a reseñar en la carrera de un jugador que viene pisando fuerte. Es el futbolista más joven en alcanzar la centena de encuentros en la máxima categoría con la entidad celeste. La polivalencia es su mejor virtud. Puede jugar en cualquier posición de la zaga y destaca por sus actitudes defensivas. Berizzo le apoda 'El Rectificador' por sus continuas coberturas a los compañeros o por su facilidad para ganar el cara a cara con un rival después de empezar la jugada en desventaja o con un error propio.

Bilardo siempre respaldó a Fazio

Federico Fazio cumplió en Vallecas 200 partidos con la camiseta del Sevilla. Es el segundo argentino que llega a esa cifra tras José Carlos Diéguez, interior derecho hispalense en la década de los 50 y 60. De vuelta en este mercado de invierno, el fichaje de Fazio en 2007 contó con la aprobación de Bilardo. "Juega en el Ferro Carril Oeste. Es un defensa muy alto, con mucho futuro por delante", diagnosticó, en su momento, el Narigón en ABC Sevilla. Luego se lo llevó a la selección argentina en 2011 cuando era el coordinador general de la albiceleste. "Bilardo siempre fue su principal valedor", afirman desde el país sudamericano.

La semana de Carlos Castro

Llevaba cinco partidos sin jugar, pero en una semana todo ha dado un vuelco. Carlos Castro marcó al Barcelona y al Betis y ha cambiado su dinámica en el Sporting. El mierense estuvo cerca de salir en invierno rumbo a un equipo de Segunda (Zaragoza y Valladolid fueron los más interesados), pero Abelardo se negó en rotundo. El técnico del Sporting siempre ha confiado en las posibilidades del delantero a pesar de los dardos que le ha ido lanzando a lo largo del curso. "Tiene que cuidar más su vida personal. Tiene 20 años pero parece que tiene 15", señaló en octubre. Fue un aviso. Abelardo lo hizo por el vínculo estrecho que mantiene con Castro. Siempre ha sido franco con él.

Las 1.000 pesetas del Unamuno, el primer héroe del derbi vasco

El Athletic- Real Sociedad de este curso ha sido el enfrentamiento número 155 oficial entre ambos en Liga y Copa. El primer derbi en Bilbao se celebró el 28 de abril de 1929. El Athletic se impuso 4-2 en un encuentro épico en el que empezó perdiendo (0-2). Unamuno I fue la estrella. El futbolista de Vergara (Guipúzcoa) había aterrizado esa temporada en el club bilbaíno procedente del Alavés. Ganaba 1.000 pesetas, tres veces más de lo que cobraba en Vitoria. Era una cantidad estimable. Con todo, tenía otra ocupación al margen del fútbol. Trabajaba, junto a Roberto Echeverría (otro jugador del Athletic), en un garaje. Los tiempos han cambiado.