Un genio anda suelto por Europa

Pues Del Bosque seguirá poniendo palitos junto al nombre de Aduriz en su libreta de posibles internacionales. Veintiséis picas lleva ya el donostiarra: 13 en Liga, cuatro en Supercopa, dos en Copa y siete en Europa con el de ayer. ¡A ver quién mira a su DNI con este nivelazo! El Athletic es hoy en día mucho más equipo que el Marsella. Tenía muy clara la estrategia: poner trincheras en la primera parte, llevar la eliminatoria a Bilbao sin que Herrerín recogiera nada de sus redes en la ida y esperar que su crack cogiese alguna. ¡Y la que cazó! Un zapatazo con toda la intención, que luego quiso repetir. De inicio se centró en armarse atrás, dejando el ataque para más adelante y a la media hora obligó a los franceses a ponerse tensos. Luego llegaron los habituales tics de este equipo bajo el mando de Valverde: se defendieron en campo contrario (estuvieron casi siempre más cerca del área contraria que la propia) y apadrinaron el cuero. Hizo el equipo un partido serio y cada vez que apretó al rival, éste se asustaba.

El Marsella, desde luego, no es un equipo fiel a su heráldica. Nada que ver con aquel de Papin que asombró al mundo. El Loco Bielsa se olía que su idilio con el Vélodrome no iba a acabar recuperando glorias pasadas. Y decidió recogerse en su país, bajo el silencio que tanto le cautiva. Sólo podría ayer salvarse a Lass Diarra, aquel trabajador impecable que tuvo el Real Madrid que formaba en un doble pivote esforzado y barredor, y que todos comparaban con su antecesor Makelele aunque él pedía que no lo hicieran. La eliminatoria no está superada, hay que repetir esta cara seria, pero huele a octavos.

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