Tino: ideas innovadoras para el Depor

El pasado 21 de enero, Tino Fernández se convirtió en presidente del Deportivo sucediendo en el cargo a su “amigo” Augusto César Lendoiro. Empresario de éxito, deportivista de pro desde hace más de cuarenta años y de carácter cercano y campechano, Tino se enfrenta a uno de los retos más grandes de su vida: sacar al Depor de la crisis económica en la que se encuentra inmerso y devolverlo a la élite del fútbol español. Y todo ello, “con muy poquito dinero, pero con muchas ganas y trabajo”. Su prioridad en estos momentos es alcanzar un buen acuerdo con Hacienda y en ello ocupa la mayor parte de su tiempo, aunque su modelo de gestión será menos presidencialista y basado más en la delegación de funciones. A falta de euros, entre sus armas para sacar la nave a flote cuenta con un arsenal de ideas innovadoras. Algunas de éstas irán dirigidas a lograr el lleno absoluto de Riazor: “Ya veremos cómo lo hacemos, bajando los precios o de otra manera, pero lo tenemos que lograr”.

Es consciente de que en el rescate del mejor embajador que tiene A Coruña deben participar todos los estamentos de la ciudad. Les pedirá a todos que arrimen el hombro. ¿Y qué piensa de Lendoiro? Pues a pesar de la dureza empleada en ciertas fases del proceso electoral, habla con el máximo respeto y afecto hacia el expresidente. Hubo un tiempo de buena sintonía en el que, desvela Tino entre bromas, Lendoiro le sacó el patrocinio de un campo de Abegondo y el alquiler de un palco vip de Riazor. Tino Fernández ha llegado al Deportivo con aire fresco.

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