Diego Costa será el arma colchonera
Diego Costa está hipermotivado para recibir al Barcelona. Sabe que es la esperanza colchonera y le encanta asumir esa responsabilidad. No le asusta nada y conoce bien las virtudes y defectos azulgranas. Respeta a Messi y su gente, pero saldrá a morder desde el pitido inicial a buscar las cosquillas a Piqué y su gente y demostrar ante Víctor Valdés que lucha por la Bota de Oro con Cristiano y Luis Suárez por méritos propios. Está tan entregado a la causa rojiblanca que hace tres semanas ha dado calabazas al Arsenal.
Junto con Courtois y la fortaleza defensiva, Diego Costa se ha convertido en la penitencia de los contrarios. No rehúye ni un choque y además atraviesa uno de esos momentos mágicos. Todo lo que toca va dentro. Diecinueve goles es una cifra más que respetable y la motivación de poder disputar el Mundial de Brasil con La Roja es la gota que colma el vaso de su ambición. Incluso ha formado con Villa una pareja que se complementa a la perfección. El Guaje hace el trabajo oscuro para que su socio culmine la faena y no hay celos entre ninguno. Está viviendo su ola buena y no quiere bajarse de la misma. Simeone le otorga total libertad de movimientos, pero huye de ser una figura. Y si hay que defender, se deja el alma. Diego Costa puede y tiene que ser el factor desequilibrante atlético y el Calderón le idolatra.