Moyes está en entredicho, Martínez gana crédito y Mourinho se pone mustio
Renovar el United. Se está definiendo la temporada y, como suele ocurrir en el análisis en el Reino Unido, todo pasa por el entrenador. David Moyes sabe que debe buscar siete jugadores que entren en el equipo titular y que para eso va a necesitar dos años. Mientras tanto, el título se le escapa y una parte de la afición, aunque minoritaria, le quiere fuera. No desearía tener que pedirle a Alex Ferguson que se le echara una mano, pero la situación empieza a ser desesperada. El Everton es uno de los equipos que mejor fútbol practican y Roberto Martínez, el entrenador de moda. Ha cambiado la cultura del club y los aficionados han pasado de dudar a creer en lo que propone el catalán.
Un mejor Arsenal. Arsène Wenger recibió con un silencio diplomático las críticas de su afición que le exigía nuevos fichajes este verano. Creía que un grupo de futbolistas que no lo habían dado todo (Ramsey, Rosicki, Walcott, Giroud...) debían crecer, cosa que está ocurriendo. Özil se muestra irregular y Cazorla está adquiriendo un punto óptimo tras su lesión. Arteta es de los mejores 4 de la liga. A Pellegrini le faltan jugadores con personalidad en la plantilla y centrales que puedan adelantar la línea defensiva (intentó sin suerte el fichaje de Pepe este verano), pero el club lo sabe y tendrán paciencia con él.
Mourinho, desencantado. Mourinho sigue entendiendo que lo que le ocurre al Chelsea es una mala planificación de la plantilla. Y curiosamente la afición acusaba a Benítez de todo lo que le perdona (de momento) al portugués. La sensación que el público británico tiene es que Mou no es el que era, no tanto profesionalmente, sino en relación a su entusiasmo: está un poco mustio.
El estilo del Liverpool. Rodgers está llevando al Liverpool a cotas soñadas pero quizá inesperadas a estas alturas de su proyecto. Le beneficia jugar un partido a la semana (no participa en competiciones europeas) y el sublime estado de forma de Luis Suárez, ahora mismo uno de los cuatro mejores jugadores del mundo. ¿El juego? Ha cambiado de sistema y estilo, y su equipo carece de la sofisticación táctica necesaria para competir al máximo nivel cuando se le exija más.
El Southampton. Pochettino, si consigue que el equipo compita por los puestos europeos, opta a entrenador de la temporada. Se ha ganado el respeto de todo el mundo aunque siga dando las ruedas de prensa en español (su inglés es muy bueno pero entiende que el equipo debe hablar por él, en una decisión acertada). El Southampton les ha sacado puntos a los grandes y el estilo de fútbol es admirado en todos los campos que visita. Finalmente, Laudrup posiblemente no siga en el Swansea. Aunque cumple objetivos, hay diferencias con la directiva. Si hay divorcio, buscarán un sustituto de nuestra Liga.