El triunfo de los argumentos de nuevo rico

Tres se redimen juntos. Tras cien partidos disputados en la temporada la energía física, la capacidad de recuperación, la resistencia a las molestias y la psicología determinan un alto porcentaje de cada resultado. Miami, que perdía 2-1 en la final de la NBA, fue capaz de reunir en el cuarto partido de la final una suma sublime, la producción conjunta más alta en muchos meses de sus tres principales jugadores. Por Texas en bañador, reivindicando su juego de aclarados, individualidades y rodillo físico, sus argumentos de nuevo rico para construir un campeón a partir de tres estrellas. LeBron James, Dwyane Wade y Chris Bosh trituraron la zona y la defensa de los Spurs.

Frío y calor. Como en un balneario, los Heat han descubierto el gusto de los contrastes del frío y del calor. Miami llegó a ganar durante la temporada regular 27 partidos seguidos, el segundo mejor récord de victorias consecutivas de la Liga. Ahora se han puesto a practicar el blanco y negro, la cal y la arena. Alternan victorias y derrotas en los últimos once partidos, pareciera que con intención de administrar la energía. Pero la alternancia no les vale para el objetivo final. Si quieren ser campeones tendrán que sumar contra San Antonio dos victorias seguidas.

Jugar y entrenar de '1'. Diez días después de anunciar su retirada Jason Kidd se ha comprometido como entrenador jefe de los Brooklyn Nets. Como jugador Kidd dio más asistencias que Oscar Robertson y Magic Johnson, metió más triples que Larry Bird, robó más balones que Jordan y Payton y cogió más rebotes que Alonzo Mourning. Pero como entrenador no ha tenido tiempo de coger una pizarra o editar un vídeo.

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