Zidane ha hecho mejor a Cristiano

El cambio. Cristiano Ronaldo sigue siendo un número uno. Se echa el equipo a la espalda si las cosas van mal y pide el balón cuando a otros les quema. Es un auténtico ganador y sabe transmitir ese espíritu en el vestuario. De eso no hay duda, pero algunas actitudes y salidas de tono le perjudicaban. Pero Cristiano ha cambiado. Ahora nos encontramos con un futbolista más solidario, menos histriónico en sus gestos y más compañero. La respuesta de Mourinho en su última rueda de prensa no fue casual. Cuando le preguntaron por los goles de Higuaín, el míster aprovechó para agradecer el trabajo de Cristiano, que dio dos asistencias de gol. En el vestuario todos valoran mucho el esfuerzo que está haciendo el portugués para cambiar. Eso ha facilitado un mayor acercamiento con Casillas. La relación entre ambos pasa por su mejor momento. Mou tiene mucho que ver en el nuevo Cristiano, pero quien más ha trabajado para lograr esta transformación es Zidane. El francés forma parte del equipo técnico del Madrid desde principio de temporada, aunque ya colaboró con Mou el año pasado. La admiración que sienten los futbolistas por el francés hace que cualquier gesto o palabra suya sea tomada muy en cuenta. La labor de Zidane con Benzema el año pasado fue clave. El Karim de ahora pelea, se cuida y se comunica más con sus compañeros. Zidane tiene la culpa. Fueron muchas horas de charla, muchas. Por eso Zidane se ha puesto manos a la obra para hacer lo propio con Cristiano, aunque el problema del portugués no era de comunicación. Cristiano es un tipo abierto y con un gran sentido del humor. Zidane y Cristiano se admiran y respetan. Entre bromas aparecía un consejo por aquí y otro por allí. Cristiano ha aprendido la lección. Evita levantar los brazos cuando no le pasan un balón y mira a sus compañeros antes que a la portería en un gesto solidario poco habitual hasta ahora. Esa soberbia le estaba pasando factura y había creado cierto malestar entre sus compañeros. Su cambio de actitud ha sido espectacular. Primero fueron las charlas que mantuvieron con él Casillas y Ramos, pero el papel de Zidane ha sido clave. Mourinho sabía que esa aportación iba a ser importante. Primero fue Benzema, después Cristiano y ahora le toca trabajar con Lass, tipo tímido y propenso al desánimo. Bien por Zizou.

El Anzhi. Roberto Carlos está encantado con su nuevo trabajo como jugador-entrenador en el Anzhi. Estuvo en Madrid esta semana, se pasó por Punto Pelota y mostró esa cercanía que le hace ser muy querido. Dijo que quiere llevarse a Rusia a Cristiano, Mourinho y Neymar. Va a por todas. Por cierto, Florentino Pérez ofrecerá a Roberto la posibilidad de que el Anzhi dispute un amistoso en el Bernabéu. Sería una buena excusa para que los madridistas brindasen un merecido homenaje al brasileño. Va siendo hora...