Superpaco y Casilla, optimistas
Fue agradable reunir a Superpaco y Casilla. El siempre sevillista y cadista, maestro de maestros en esto del balón, alentó a Casilla a mirar hacia adelante y apostó por la salvación del Cádiz. Ruiz Brenes, hoy en día propietario del restaurante Timón de Roche, advirtió a Kiko de que en la vida de un profesional se atraviesan ciclos y que deben aceptarse. Destacó que la constancia es ineludible para cualquier futbolista. Y reflejó también el giro que experimentó el denominado deporte rey desde que él abandonase como profesional en activo.
Superpaco alcanzó la internacionalidad aunque se encontró en su camino al posiblemente mejor portero de todos los tiempos, José Angel Iríbar, del que siempre habla con admiración. El 'alumno' Casilla agradeció las palabras del maestro y escuchó con atención sus intervenciones. Casilla anda preocupado por los goles que encaja el equipo, pero se mostró cauto en sus apreciaciones porque, según dijo, "queda mucho y sólo estamos a tres puntos de conseguir la permanencia, que es el objetivo que buscamos". El meta amarillo, con quien parte de la afición se muestra excesivamente crítica, es plenamente consciente de lo mucho que se juega el equipo justo cuando llega el Centenario y de ahí que pida unión para sacar adelante una nave que parece hundirse con tantos problemas. Paco y Kiko, pasado y presente del Cádiz, terminaron brindando por la permanencia y destacando que una afición como la amarilla no merece tanto sufrimiento.