Ante el mejor joven del pelotón

Sin ninguna duda, Robert Gesink es el ciclista joven más prometedor del pelotón internacional. Y, con diferencia, el mejor corredor holandés y el único capaz de afrontar con posibilidades de subirse al podio en una carrera grande de tres semanas. Su edad, 23 añitos, ha provocado que no haya coincidido con él en la carretera, pero como aficionado está claro que me atrae su condición de escalador valiente. Gesink reúne condiciones suficientes como para hacer algo grande en esta Vuelta a España. Ha superado ya dos cronos y marcha tercero en la general, a sólo 36 segundos de Alejandro Valverde, con tres llegadas en alto aún por delante.

Con sus años, sólo le veo un rival en Andy Schleck, aunque el luxemburgués se ha confirmado ya como toda una realidad del ciclismo, con dos segundos puestos en Giro y Tour, y una Lieja en su palmarés. Recuerdo que la primera vez que me llamó la atención Gesink fue en la París-Niza del año pasado, cuando superó a Cadel Evans en la subida al Mont Ventoux. Cosas como esas, y su séptima posición en la Vuelta de 2008, le convierten en claro aspirante a ganar la ronda española. Por cierto, en nuestro país no está claro el relevo generacional, pero vamos a tener Alberto Contador para rato.