Mundos diferentes en Vitoria
En Vitoria hace tiempo que sonó la alarma. Las posibilidades de descenso son reales y unidas a las penurias económicas podrían complicar la existencia del club. Estas afirmaciones las hizo Astudillo, que con más de 300 partidos con los albiazules es una voz autorizada. Esa sería la parte negativa, la positiva para el Alavés es que está jugando bien a pesar de afrontar un duro tramo del calendario. Con Javi López como entrenador, el rendimiento futbolístico ha mejorado y también la imagen. A eso se aferrarán para enfrentarse hoy a un poderoso Hércules.
La vuelta de Juanjo con una máscara para proteger su dentadura y el oportunismo de Javi Guerra afilan el ataque vasco. Será vital la respuesta de Mendizorroza donde, a pesar del horario inusual de tarde, se esperan 10.000 aficionados. El Hércules sabe que a pesar de la delicada situación del Alavés no podrá llegar relajado. Su segunda posición es fruto del talento de la plantilla y el cuerpo técnico, pero también del carácter arañando puntos en los últimos instantes. Las sanciones de Tuni, Exposito y Abel Aguilar y la vuelta de Dani Bautista alterarán el once de Mandiá.