Javi Guerra, hermanado con el gol

Ocho goles quizás no parezcan muchos, pero si un jugador los ha logrado en un equipo que ha cambiado dos veces de entrenador y está peleando por no descender, el valor de cada una de esos aciertos de cara a puerta se multiplica. Javi Guerra empezó su carrera como central, pero ahora su obsesión es llevar la pelota a la portería contraria siempre que pueda. El delantero de Vélez-Málaga está confirmando en Vitoria la progresión que mostró la pasada campaña en el Granada 74. Hombre de área, Javi Guerra acabó el curso con ocho tantos en su haber siendo traspasado al Mallorca. Los bermellones cuentan con una amplia lista de cedidos y, en este caso, Javi Guerra recaló en un Alavés que estaba necesitado de una referencia clara en la delantera y en la que se encuentra bastante solo.

Ha tenido una carrera movida jugando en distintos clubes de Andalucía, Cataluña y Portugal hasta llegar al filial del Valencia en 2004, donde llegó a debutar en Primera con Quique Flores. Estos vaivenes son similares a los de su hermano gemelo Emilio, prolífico goleador (hizo 42 con el Zaragoza B en Tercera) y que hoy forma parte del filial del Atlético. Con 25 años, Javi Guerra sabe que confirmarse como un goleador regular en Segunda le puede abrir las puertas de su vuelta a Mallorca o plantearse otros retos, aunque el más inmediato es aportar goles para salvar al Alavés. Cada vez queda menos y cada gol que marque es oro puro para los albiazules.