La elegante impotencia del United

El Manchester United demostró anoche que es un equipo organizado que no sólo vive de una estrella como Cristiano Ronaldo. El hombre más importante del United está sentado en el banquillo y no se llama Carlos Tévez. Es Sir Alex Ferguson. Anoche dio una lección táctica y futbolística al Inter jugando como si lo hiciera en su campo o como si tuviera que remontar un resultado adverso. Con una personalidad impresionante, su único defecto fue no poder marcar el tanto para sentenciar la eliminatoria con noventa minutos de antelación.

Y no lo pudo hacer por culpa de la extraordinario calidad de Julio César, el portero del Inter que hoy es el número 1 no sólo de Milán sino del mundo. El Inter de Ibrahimovic se ha convertido en el Inter de Julio César que ahora, a pesar de sus enormes dificultades, debe jugarse la eliminatoria en Old Trafford. Y eso quizás sea bueno porque esta temporada el Inter sólo ha ganado una vez en su campo por más de un gol de diferencia, pero fuera de casa ha vencido con impresionante facilidad a muchos rivales Y ahora quiere hacerlo en Old Trafford. Nadie puede saber cómo terminará la eliminatoria, pero en el ecuador de la misma, Mourinho no sale ganando como esperaba.

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