Muñoz habló ayer en la Cadena SER y lo hizo a gusto y sin cortapisas. No dudó en estar en directo durante 30 minutos al teléfono e intercambió pareceres incluso con nuestro compañero Alvaro Rivero, quien también intervino en el programa. Precisamente, a la columna de Alvaro ayer en AS pidiendo la continuidad del presidente este respondió tajante. Muñoz argumentó que "las negociaciones siguen su curso y difícilmente se echarán atrás", eso sí, dejando muy claro que Pina o cualquier otro comprador de las acciones nunca podrán llevarse el equipo de Cádiz basándose en la Ley. En cualquier caso estoy con Rivero en que me preocupa como gaditano y cadista qué determinaciones tomará quien recoja los bártulos.

A mí, que conozco en profundidad los números de un Cádiz que a punto estuvo de desaparecer no hace demasiado tiempo me preocupa que quien llegue gaste a diestro y siniestro y vuelva a meternos en un callejón del que difícil sería salir adelante. Entiendan que me preocupe. Tal y como está el fútbol, negocio puro y duro, no sería el primer ni último club cuyos dirigentes echen por tierra lo que tanto ha costado levantar. Y no me hablen de sentimentalismos, pues ya me dirán el amor que tienen a nuestro Cádiz los que en breve, sean quien sean, recojan la nave. En definitiva, que espero prudencia en quienes lleguen. Y es que Cádiz no es Segovia, con todos mis respetos a la ciudad del más bonito acueducto del mundo. Aquí somos distintos.