Wilkinson es un león hambriento

El retorno de Wilkinson a la selección fue una exhibición. Jonny sólo había jugado 43 minutos con su club, el Newcastle, pero fue suficiente para volver a demostrar, tres años y dos meses después de su drop en la final del Mundial, que es superior al resto. No sólo tiene el don de patear bien. Un don, por cierto, adquirido tras muchas horas de entrenamiento. Además posee el carácter para arrastra y hacer creer a los demás jugadores de que ganar es posible. Ahí estuvo apoyando.

En Twickenham se ha pasado de sufrir a disfrutar. Sólo hay una diferencia con respecto al equipo que perdió en noviembre ante Suráfrica: Wilkinson. El nuevo entrenador Brian Ashton ha introducido cambios, pero sin él nada hubiera sido igual ante Escocia. Wilko ha transformado en un partido a este equipo perdedor. Él es la diferencia entre un buen equipo y un equipo potencialmente campeón. Tras su actuación los pronósticos del torneo cambian. Si antes era Irlanda el favorito, ahora todo cambia. Inglaterra ganará en Twickenham a Italia, pero no será hasta el sábado 24 de febrero cuando se mida en Dublín a Irlanda.

Desde hoy cuento los días que quedan para ese partido, volver a ver a Wilkinson en un partido de máximo nivel. Lo mejor es que Jonny tiene hambre de éxito. Es un ganador que no puede perder más tiempo para hacer historia dentro del rugby. Es un león hambriento. Su retorno ha sido espectacular, bueno para el rugby, bueno para Inglaterra, bueno para todos.

Lo más visto

Más noticias