Claro que Messi jugará en el Bernabéu

Messi jugará en el Bernabéu como Dios pintó a perico. Siempre que Rijkaard lo disponga así, claro. Messi jugará en el Bernabéu porque el Barça tiene el control de esta Federación y es en vano que la Liga enrede con ello, porque esa licencia con foto y sello se la ha expedido a Messi el sistema dominante, léase el triunvirato Villar-Gaspart-Laporta y eso no hay quien lo mueva. Salvo el CSD, que no lo creo, y si lo mueve será desde luego después del partido del sábado. Será dentro de algún tiempo, a ser posible para enero, y para entonces ya no importará, porque Messi podrá ser inscrito legalmente.

Messi jugará del mismo modo que no se cerró el Camp Nou, del mismo modo que no tuvo ninguna consecuencia la retirada de la Copa, ¿recuerdan? ese día en que nueve tipos a la orden del capitán Guardiola hicieron el mamarracho para decirle a Díaz Vega que no se atrevían a afrontar el 3-0 de ida ante el Atlético, porque Van Gaal no quería pedirles a sus amigos holandeses un par de días de moratoria para los internacionales del país de los tulipanes. Messi jugará porque, ya lo he escrito alguna vez, usted no sabe con quién está hablando, yo soy el Barça, qué se ha creído, y yo aparco donde quiero.

Que juegue o no Messi no es tan importante en términos estrictamente futbolísticos. Va para gran jugador, pero aún es poco más que un buen suplente en el Barça. Hoy no tiene derecho a jugar, pero en enero sí lo tendría. El Barça es bueno con él o sin él. La importancia del caso es esa fantochería impune con la que el Barça y Villar se ponen el mundo por montera porque sí. Porque el Barça votó a Villar contra toda idea de decencia, sensatez y lógica y porque Villar no tiene otra puerta tras la que esconderse que la del Barça y su retórica de valedor de unos pretendidos valores que Laporta reduce a calzoncillos.