El Valencia comparece en la Intertoto

Me gusta la Intertoto, aunque sé que tiene detractores. Sobre todo entre los futbolistas. Albelda la criticaba hace poco, pero hoy le tocará jugarla. En cierto modo, muchos de los equipos españoles que la juegan purgan en ella su mal desempeño del año anterior, porque sus aspiraciones eran otras. Clubes dimensionados para jugar en Europa, con aficiones acostumbradas a que lo hagan, y que necesitan, por prestigio y presupuesto, estar al menos en la UEFA. Ese es el caso este año del Depor y el Valencia, y en cierto modo también el del Athletic, que ya está fuera. El empeño es entrar en Europa por la gatera, ya que no pudieron entrar por la puerta.

Me intriga el Valencia de esta temporada. El gran equipo del doblete debería seguir ahí, porque ahí están sus componentes. Pero ¿sigue realmente ahí? El año pasado sufrió el tremendo impacto ecológico de la salida de Benítez y la llegada de Ranieri con sus italianos. Ahora le toca a Quique la reconstrucción, y me intriga saber si tirará por las buenas de aquel equipo de hace poco más de un año, el de Benítez, o si le irá metiendo injertos. Tiene bonitas posibilidades, como la de Villa, el guaje goleador, Kluivert, que no ha mucho fue un genio de la media punta, o Albiol, su jugador de confianza en el Getafe, al que no ha querido renunciar.

Buena plantilla, buen entrenador. Supongo que la mezcla tiene que funcionar. Para Quique es la prueba del nueve. Un segundo éxito le avalaría definitivamente, por aquello de que dos puntos definen una línea recta. Yo lo deseo, porque al fútbol le vienen bien entrenadores de este tipo, educados, con buen gusto por el fútbol. Pero las circunstancias no son las mismas: en Getafe entró en un club que iba de menos a más, en el que todo era buena fe y entusiasmo. En el Valencia tiene que reconstruir un ambiente que se malogró, en un club acostumbrado muy recientemente a los mayores éxitos. Esta tarde empezaremos a medirle.